Reyal Urbis fracasa hasta en su liquidación: desierta la subasta del ‘megalote’
La inmobiliaria Reyal Urbis ha declarado desierta la subasta del ‘megalote’ de activos que abrió el pasado octubre por un mínimo de 220 millones de euros, para la liquidación de la compañía, y ha optado por ir sacando lotes más pequeños y homogéneos, han confirmado a Efe fuentes del sector.
La nueva estrategia, adelantada por Cinco Días y El Confidencial, persigue encontrar inversores que encajen con cada lote y maximizar los precios.
Reyal Urbis, la mayor morosa de la Agencia Tributaria con una deuda de unos 341 millones de euros, está en fase de liquidación desde 2017, tras declararse en concurso de acreedores en 2013.
Los activos de la macrosubasta que ha quedado desierta incluyen hoteles, oficinas, garajes y suelos, entre ellos el Hotel Rafael Atocha (Madrid), el Hotel EH Pirámides (Madrid), el Hotel RH Ventas (Madrid), el Hotel RH Badalona (Barcelona) y el Hotel Pleta (Baqueira Beret, Lleida).
También, un garaje en la calle Cartagena (Madrid), un edificio de oficinas en la calle Torrelaguna (Madrid) y plantas de oficinas en la calle Ayala (Madrid), así como suelos y solares en Pozuelo de Alarcón (Madrid), Zarandona (Murcia), Valencia, Jerez (Cádiz), Málaga, Palma y Vigo (Pontevedra).
La Sareb, uno de sus principales acreedores, que en su día se opuso a la macrosubasta ante la administración concursal, confía en que con lotes más pequeños y homogéneos se pueda maximizar el valor de los activos.
Surgida en 2007 de la fusión de Inmobiliaria Urbis y Construcciones Reyal, Reyal Urbis contaba, a 31 de diciembre de 2012, con un banco de suelo total de 7,8 millones de metros cuadrados de edificabilidad sobre rasante, lo que la convertía en una de las principales empresas europeas en la actividad de promoción residencial.
La compañía poseía una relevante cartera de activos en renta valorada en dicha fecha en más de 459 millones de euros, diversificados en oficinas, centros comerciales, locales, naves industriales y hoteles bajo la marca Rafaelhoteles.
Tras casi dos años de negociaciones con los acreedores, y al no haber podido alcanzar un acuerdo de refinanciación con ellos, Reyal Urbis presentó concurso voluntario de acreedores con fecha 19 de febrero de 2013, el cual fue aceptado por Auto del Juzgado nº 6 de lo Mercantil el 4 de marzo de 2013.
El 1 de septiembre de 2017 el juzgado notificó el auto de liquidación de la Sociedad, y dictó su disolución, así como el cese de los administradores sociales.