Sánchez liga la subida salarial de los funcionarios al sector privado
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha ligado la evolución de los salarios de los empleados públicos al acuerdo para la negociación colectiva que en el ámbito privado están hablando las organizaciones patronales y sindicales, y que el Ejecutivo enmarca en el llamado «pacto de rentas».
«Ahora mismo sindicatos y empresarios están negociando ese acuerdo de rentas, donde no solamente se tiene que hablar de salarios, también se tiene que hablar de dividendos, de reparto de beneficios por parte de grandes empresas, y en función de ello veremos cuál es la evolución y la negociación que se articula respecto a los trabajadores públicos», ha afirmado en una entrevista en Antena 3.
La negociación entre sindicatos y patronal para fijar una recomendación salarial para 2022, 2023 y 2024 de momento está estancada, ya que la CEOE rechaza la propuesta de UGT y CCOO de recuperar en los próximos años el poder adquisitivo perdido en 2022.
Para los empleados públicos los presupuestos de 2022 contemplan una subida del 2 %, aunque el Gobierno tendrá que decidir si en 2023 les aplica una subida mayor para compensar la elevada inflación que se prevé para este año.
Sánchez ha insistido en que todas las previsiones plantean una inflación muy alta para 2022 que será coyuntural y que para 2023 se calcula que se moderará significativamente.
En concreto, ha destacado la previsión del Banco de España, que espera una inflación media del 7,5 % para 2022, pero del 2 % para 2023 y del 1,6 % en 2024.
«Esperemos que esta alza de la inflación sea lo suficientemente coyuntural para que no veamos los próximos años un alza de la inflación relevante», ha dicho el presidente.
Sobre las pensiones ha asegurado que «está garantizada su revalorización conforme a la reforma que hizo el Gobierno de España y la ley», por lo que en 2023 subirán de acuerdo con la inflación media de este año.
«Esta no es una cuestión de voluntad de un Gobierno o de otro, está inscrito en la ley», ha insistido Sánchez, en línea con lo que en las últimas semanas han venido repitiendo también otros miembros del Ejecutivo como la vicepresidenta primera, Nadia Calviño; el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, o la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.