Saracho dice a la AN que barajó otras opciones a la venta del Banco Popular

El expresidente del Banco Popular Emilio Saracho ha aportado a la causa de la Audiencia Nacional (AN) que investiga las dos últimas gestiones de la entidad una serie de correos electrónicos para desmentir que su intención desde su llegada al banco fuera venderlo o «estampárselo» al BCE, y demostrar que barajó otras opciones.

Los documentos aportados ponen en cuestión lo declarado en sede judicial el pasado 22 de octubre por el que fuera director de Comunicación del Popular entre 2012 y 2017, Carlos Balado, que achacó su salida de la entidad al deseo de Saracho de vender el «puto (sic) banco» y no tenerlo a él como testigo.

De no prosperar su venta, la otra opción era «estampárselo en la boca» a Danièle Nouy, al frente del Mecanismo Único de Supervisión (MUS), explicó Balado al juez instructor, José Luis Calama, según indicaron a Efe fuentes jurídicas. personalmente.

Ahora, Emilio Saracho ha aportado correos electrónicos intercambiados entre él y Balado que mostrarían que este último estaba al tanto de que se barajaban «todas las opciones».

Una de las piezas de la investigación que se sigue en la Audiencia Nacional aborda los 108 días de mandato de Saracho, para aclarar si hubo un posible delito de manipulación del mercado con noticias falsas para hacer caer el valor de la cotización.

Se trata de la publicación el 11 de mayo de 2017 -apenas un mes antes de la resolución del banco- de una noticia de «El Confidencial» titulada «Saracho encarga la venta urgente del Popular por riesgo de quiebra a JP Morgan y Lazard».

Sobre este punto, Emilio Saracho explica que se puso en contacto con el periodista para que corrigiera la información, y convocó a la asesoría legal, a la secretaría general técnica, a los abogados externos y al departamento de comunicación para contrarrestar los efectos de la noticia, tal y como declaró ante el juez el que fuera su mano derecha y director financiero del banco, Miguel Escrig.

El propio Balado, en correos enviados a Saracho, apuntaba a alguna indiscreción de miembros del consejo.