Turquía, el mercado que hace temblar al BBVA, sube en seis puntos su previsión de inflación para 2024
El Banco Central de Turquía revisó al alza su previsión de inflación para 2024, del 38 al 44 %, según anunció este viernes el gobernador de la entidad, Fatih Karahan. Turquía, golpeada por escalda de precios imparable que ahoga su economía, es uno de los mercados más importantes para el BBVA, donde cuenta con el Garantí Bank. Para Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell, sobre el que el banco vasco tiene lanzada una opa hostil, el BBVA es un banco desacoplado del mercado español y europeo, sometido a vaivenes de economías lejos de una estabilidad deseable tanto en su marco financiero como jurídico.
Josep Oliu, presidente del Sabadell, lo deja muy claro. El BBVA cuenta con una alta exposición a los países emergentes y, por tanto, «desacoplados, para bien o para mal, de los mercados españoles o europeos». De hecho, en 2023 y en los primeros nueve meses de 2023, México es el motor de los resultados de la entidad presidida por Carlos Torres que aspira crecer en el mercado español con la compra hostil del Sabadell.
Turquía, foco de tensión para el BBVA
El BBVA siempre ha mostrado una gran confianza en el mercado turco, que, sin embargo, no logra enmendar su economía.
El gobernador del Banco Centra de Turquía, Fatih Karahan, reconoce que «la mejora en las expectativas de inflación no es tan rápida como desearíamos» y lejos de cumplirse sus pronósticos de reducción de precios, ahora los vueleve a subir.»Estimamos que la inflación será del 44 % a finales de 2024″, declaró en una rueda de prensa.
La oficina estatal de estadística (Turkstat) informó el lunes de que la inflación registró un aumento del 2,88 % en comparación con septiembre y se situó en un 48,58 % interanual.
Ahora Karahan proyecta sus previsiones para poder frenar al alta inflación en Turquía para año venideros. Afirma que el IPC se reducirá al 21 % en 2025 y al 12 % en 2026, con el objetivo a medio plazo del 5%. El 12% previsto para dentro de dos años supone triplicar la tasa de inflación ideal aceptada por el Banco Central Europeo, la Reserva Federal de Estados Unidos u otros grandes bancos centrales de economías avanzadas, como el de Inglaterra o Japón,
«Estamos decididos a asegurar que las expectativas se alineen con el proceso de bajada de la inflación mediante una política monetaria estricta. Mantendremos esta estricta política monetaria hasta lograr la estabilidad de los precios», afirmó Karahan.
El banco emisor, que ha mantenido los tipos de interés en el 50% desde marzo, evitó responder sobre posibles bajadas futuras del precio del dinero.
Y mientras tanto, el BBVA tiene entre sus principales mercados a un país donde ni los tipos de interés al 50% atajan una inflación en niveles parecidos al precio del dinero.