Forcadell desafía al Estado: ‘Se cumplirá la ley catalana’
La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, ha dicho hoy que todavía no ha recibido ninguna notificación de La Zarzuela para comunicar al Rey la investidura de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, aunque este trámite «se puede hacer por carta».
En declaraciones al canal 3/24-TV3, Forcadell ha indicado que aún no había recibido ninguna notificación para trasladarse a Madrid y comunicar a Don Felipe la investidura de Puigdemont, pero ha añadido que «se puede hacer por carta» y, en todo caso, si no se llevara a cabo hoy, no modificaría los siguientes pasos, como la toma de posesión del nuevo presidente catalán, prevista para mañana.
«Si no nos pueden recibir, por cualquier motivo, se puede hacer por carta», ha detallado Forcadell, a quien le es «igual» cómo comunicará al Rey la investidura de Puigdemont, si por escrito o presencialmente, pues este trámite «no cambia nada» de los tiempos previstos.
Asimismo, Forcadell ha insistido en que la resolución aprobada el pasado 9 de noviembre y que daba el pistoletazo de salida a una futura independencia de Cataluña «sigue vigente», y, en este sentido, el Parlament «cumplirá escrupulosamente la legalidad vigente, la española, hasta que haya una legalidad catalana«.
Para Forcadell, la actual legislatura «empezó hace tres meses», cuando se celebraron las elecciones autonómicas, aunque, eso sí, «los 18 meses se cuentan a partir de que haya Gobierno«.
Igualmente, la expresidenta de la ANC ha dicho también que «no entiende que se pueda inhabilitar a nadie por cumplir un mandato democrático», en referencia a posibles nuevas inhabilitaciones del nuevo Gobierno. Además, «el Parlament representa a todo el mundo y se tiene que ejercer el derecho de defensa«.
En lo referente a las negociaciones del pasado sábado entre JXS y la CUP y la investidura de Puigdemont, ha declarado que «se han cerrado algunas heridas y las cicatrices recuerdan lo difícil que ha sido llegar hasta aquí», unas cicatrices que son «un recuerdo y una autocrítica«.