García-Gallardo destaca la «alegría enorme» que supone «ralentizar» las imposiciones de la Euro 7
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, reconoció hoy en Burgos sentir “una alegría enorme” por la postura anunciada ayer lunes, 25 de septiembre, por parte del Consejo de la Unión Europea (UE) sobre la Euro 7, que retrasan los objetivos de recortar las emisiones de CO2 de los vehículos.
En este sentido, aplaudió que la decisión de la UE de “ralentizar” y “rebajar” las imposiciones en materia de emisiones de CO2 para la industria del automóvil haya sido “un primer paso hacia el sentido común, hacia imponer la cordura” y que “decenas de miles de empleados de Castilla y León hoy descansen más tranquilos, sabiendo que la industria del automóvil de Castilla tiene un futuro de prosperidad y un horizonte correcto”.
Lo dijo durante su intervención en el acto de clausura de la jornada ‘Casos de éxito de Empresas con I+D+i -Valle de Innovación’, que se celebró en el Hotel Abba de la capital burgalesa. “Estamos de enhorabuena en todo Castilla y León, pero en Burgos en particular, por la decisión que se anunció ayer de los 27 estados miembros de ralentizar y rebajar las imposiciones que se hacían en materia de emisiones de CO2 para la industria del automóvil”, exclamó.
En este sentido, manifestó que “no acertaremos en alguna de nuestras decisiones” pero aseguró que “nunca nos equivocaremos en los intereses que debemos defender”. “Y era evidente que el interés general de Castilla y León, y en particular de la provincia de Burgos, era la de defender los intereses de la industria del automóvil y de la movilidad”, afirmó.
Por ello, argumentó que “sabiendo las amenazas que había para la industria a nivel de normativa comunitaria de esa Euro 7, que no solo se aplica a los motores de combustión, sino también a los sistemas de freno de los neumáticos, hemos aprovechado todas las ocasiones en foros regionales, en foros nacionales, en foros internacionales, para defender los intereses de la industria, que no son solo los de las empresas, sino que son principalmente los de los trabajadores y también de los consumidores que quieren tener acceso a unos vehículos a un precio razonable en las circunstancias de la normalidad”.
Por eso, aseveró que cuando se ha desplazado al Comité Europeo de las Regiones o a diferentes foros internacionales de innovación en materia económica para defender los intereses de la industria en la Comunidad, “hemos apostado por una transición lenta, una transición dulce hacia nuevas formas de movilidad” porque, dijo, “es evidente que si la industria está clamando y está diciendo de todas las maneras posibles que no se iban a poder adaptar a estas restricciones en un periodo tan breve de tiempo, el deber de un Gobierno autonómico es el de defender los intereses de su industria”.
Asimismo, García-Gallardo pidió ‘permiso’ para “mostrar con orgullo cuál ha sido la posición coherente del Gobierno regional en su conjunto en la defensa de estos intereses” porque, según recordó, “les aseguro que no eran los mismos que defendió el Gobierno regional de la Comunidad Valenciana en ese momento, ni el de la Comunidad Foral de Navarra, ni el de Galicia, por citar solo algunas de las comunidades que tenían presencia en esas regiones”.
“Muchos se sumaban a esa ola, que en nombre de la protección del medioambiente, aceptaban cualquier imposición en esta materia; y nosotros, sin embargo, en solitario o con escasa compañía de alguna otra región del Este de Europa y alguna región italiana, dijimos que había que imponer el sentido común y la cordura”, afirmó.
“Y creo que la política, que últimamente nos trae tantos sinsabores, y hoy es un día especial para recordarlo, pues cuando uno tiene una pequeña victoria o una pequeña alegría, debe comunicarlo y debe hacerlo público”, exclamó.