García-Gallardo insiste ante Mañueco en que Vox «no regalará» los votos al PP en las Cortes
ICAL
El portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León, Juan García-Gallardo, advirtió hoy al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, de que no expedirá “un cheque en blanco” ni va a “regalar” sus votos en el Parlamento autonómico ante las “incógnitas” que, a su juicio, deja el Partido Popular en asuntos como la inmigración o la tramitación de la Ley de Concordia.
A su salida de la reunión mantenida con el presidente de la Junta, el hasta hace dos meses vicepresidente del Gobierno autonómico lamentó, en declaraciones recogidas por Ical, que el cónclave se convocase “sin orden del día” y que no se haya tratado de una “primera negociación” ante el proyecto de presupuestos que presentará el actual Ejecutivo de la Comunidad “en minoría del PP”, sino que se hayan puesto encima de la mesa “asuntos que ya se trataron hace meses y que están agotados”, como el Corredor Atlántico o el combate jurídico contra la Ley de Amnistía.
“No ha sido provechosa”, resumió García-Gallardo, que también criticó que, cuando su formación ha puesto sobre la mesa “temas que podría beneficiar a Castilla y León, como la vivienda, la despoblación, una onmigración ordenada y legal, apostar por la natalidad o apoyar al campo y al medio rural, se nos ha dicho que hoy no era el día”.
Por ello, reiteró su “inquietud” ante la falta de respuesta en cuanto a las políticas que llevará a cabo la Junta “para combatir la inmigración ilegal y masiva y el efecto llamada”, o respecto a la tramitación de la proposición de Ley de Concordia, que PP y Vox registraron el pasado mes de abril en las Cortes “después de mucha negociación, concesiones y diálogo”.
“Seguimos con muchas dudas sobre qué Partido Popular nos espera en lo que resta de legislatura”, planteó al respecto García-Gallardo, asegurando que si lo que el Partido Popular quiere es “que Vox le expida un cheque en blanco, no pueden contar con ello”, ya que su formación, según el exvicepresidente autonómico, “va a defender a sus votantes y no va a regalar sus votos en las Cortes”.
Un mensaje que, recordó, ya plantearon durante la campaña y en los dos años y medio en los que se mantuvieron dentro de la Junta “hasta que se nos obligó a salir por el incumplimiento reiterado de distintos puntos del acuerdo por instrucciones de Feijóo”. “Ahora parece que esperan instrucciones de Madrid para ver qué relación tener con el resto de grupos políticos”, aseguró Gallardo en relación al PP.
De hecho, mantuvo que esta situación “no es nueva” y que ya se explicitó cuando “Pablo Casado trató de impedir nuestra entrada en el Gobierno”. Sin embargo, pese a esos incumplimientos, García-Gallardo apeló a la “seriedad y responsabilidad” de su partido para mantener la “mano tendida” y la “voluntad de llegar a acuerdos” aunque siempre sin “participar en el plan del Partido Popular para que les demos un cheque en blanco. Para eso no pueden contar con nosotros”, concluyó.
Ley de Concordia y presupuestos
Preguntado al respecto de la tramitación de la proposición de Ley de Concordia, García-Gallardo explicó que le propuso al nuevo portavoz del PP en las Cortes, Ricardo Gavilanes, que se presentase al próximo pleno ya que, de lo contrario, “pasaría a la cola”.
“Nos dijo que sí y, con la confianza de a quien le han dado su palabra, fui a la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces para decirlo”, aseguró Gallardo, que lamentó que la reunión de hoy no haya servido para “despejar la duda” que dejó el propio Gavilanes en su comparecencia tras la misma Junta de Portavoces del jueves.
Un resultado de lo que denominó como “crisis de identidad” del Partido Popular, que criticó que “no sabe si quiere votar a favor de una ley que ellos mismos han contribuido a diseñar”. Por ello, y con los principios de Vox “claros”, manifestó que “si el PP necesita tiempo para definir los suyos, les pedimos que los aclaren a la mayor brevedad”, porque, aseveró: “No vamos a seguir tendiendo la mano si seguimos recibiendo patadas en la espinilla o hacia adelante en este tipo de temas”.
En relación a los presupuestos, consideró que los 200.000 votos obtenidos en las elecciones autonómicas dan a Vox “un porcentaje de representación” con el que aspiran a ser “parte sustancial de las propuestas para una eventual negociación”, aunque aseguró que acudirán a la negociación con el PP “sin líneas rojas de antemano” para poder comunicar allí a su ya exsocio de gobierno sus “condiciones innegociables”.
Finalmente, y sobre un posible adelanto electoral en Castilla y León si no salen adelante las cuentas para 2025, García-Gallardo recordó que “es el señor Mañueco quien tiene el botón rojo y su voluntad expresada, no sabemos si real, es agotar la legislatura”.
Recordó, en ese sentido, que “hay un presupuesto aprobado para 2024 que permite prorrogarse hasta finales de 2025”, lo que permite al presidente de la Junta “gobernar de espaldas al Parlamento”. “Pero la voluntad íntima del presidente no la conozco”, concluyó.