El hermano de Ignacio González, detenido y registros en la empresa de su mujer

Efectivos de la UCO han detenido al hermano de Ignacio González, directivo de Mercasa, cuya sede también ha sido registrada, junto a la casa de subastas Segre, presidida por la esposa de Ignacio González, Lourdes Cavero.

Todos estos registros están enmarcados en la operación Lezo, en la que se investiga al Canal de Isabel II por la compra de una empresa brasileña, Emissao Engenharia e Construçoes, cuya compra fue denunciada por PSOE, Ciudadanos y Podemos.

En la operación de la Guardia Civil se investiga la gestión del Canal de Isabel II. La detención de Ignacio González, presidente de la Comunidad entre 2012 y 2015, es solo una parte de la misma, ya que se están llevando a cabo al menos otras 12 detenciones y registros, como la casa de subastas Segre, que preside la mujer de González, junto a Mercasa, donde el hermano de González es un directivo.

El juez Eloy Velasco también ha citado como testigo a Cristina Cifuentes para dar toda la información posible sobre los presuntos desvíos de dinero. De momento, el PP ha actuado con contundencia, al suspender de militancia a González, un hecho que no hizo con el imputado presidente de Murcia. Todas las diligencias son secretas, incluidas las órdenes de detención, pese a que se ha filtrado a La Sexta.

En la operación se investiga la compra de sociedades en el extranjero por parte del Canal de Isabel II. En concreto, el epicentro se sitúa en Emissao Engenharia e Construçoes, una empresa de Brasil que fue objeto de denuncia por parte de los grupos de la oposición en la Asamblea de Madrid. Las compras se realizaban con precios muy superiores al valor real de las empresas. Según la Fiscalía Anticorrupción, González sería el principal responsable de una «organización criminal» que desviaba fondos públicos.

González está detenido supuestamente por delitos de organización criminal, malversación de caudales públicos, prevaricación, cohecho, fraude a la Administración y blanqueo de capitales, entre otros. La detención se produce dos años después de iniciarse este caso de presunta corrupción.

El Gobierno de Cifuentes denunció las «anomalías» en las filiales de Canal en Iberoamérica. El nuevo equipo directivo del Canal Isabel II, dirigida por Rafael Prieto, realizó una auditoría y comenzaron con las compras más recientes de empresas en el extranjero. Se inició así el análisis sobre la brasileña, que costó 21,4 millones de euros, cuyo valor contable era de solo 5,4 millones y entró en pérdidas de 5,5 millones en el balance del Canal.

Cifuentes detalló que lo detectado tenía que ver con compra de acciones por un precio muy superior al del mercado, pero puso el dedo sobre Edmundo Rodríguez, el entonces presidente ejecutivo de la Sociedad Interamericana Aguas y Servicios, S.A. (Inassa).