Lluvia de críticas a Juncker: Los presupuestos de la UE son inaceptables

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha recibido duras críticas por los Presupuestos de la UE. Holanda y Suecia junto con gran parte de la izquierda parlamentaria han cargado contra el aumento de los Presupuestos cuando Reino Unido se habrá ido de la UE.

Desde Holanda han considerado que la contribución que tocaría es «demasiado elevada». «En lo que respecta a Holanda, esta propuesta no es un resultado aceptable», señaló el Gobierno holandés en un comunicado, en el que se agregó que la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) en marzo de 2019 debería traducirse en un presupuesto comunitario «más reducido».

Bruselas no tiene en cuenta los efectos negativos del Brexit

En su propuesta, la Comisión Europea aboga por elevar el presupuesto del 1,03% actual de la renta nacional bruta conjunta al 1,11%. Pero Holanda considera que el «brexit» tendrá un efecto suficientemente negativo en su economía, a lo que el presupuesto comunitario añade «una factura desproporcionadamente alta«.

«La Comisión reconoce que los países que soportan la carga más pesada merecen una compensación. Pero sólo ofrece una solución temporal en forma de reembolsos que se eliminan gradualmente a lo largo del tiempo», por lo que «la rechaza».

El Gobierno del liberal Mark Rutte adelantó que su país presionará en las negociaciones a favor de «un presupuesto moderno, en el que los costos se compartan equitativamente». «Todavía hay muchas negociaciones por delante», agregó el Ejecutivo holandés, que subrayó que «los países de la UE decidirán, a más tardar en 2020, cuánto dinero habrá disponible y en qué se gastará».

El Gobierno alemán, por su parte, ha tildado de «importante primer paso» la propuesta de presupuesto de la UE de la Comisión Europea (CE) y se mostró dispuesto a aumentar su contribución, pero abogó por una «modernización fundamental» del mecanismo de reparto de fondos.

Suecia tilda de «no razonable» los Presupuestos europeos

El Gobierno sueco ha tildado de «no razonable» la propuesta de la Comisión Europea (CE) para el próximo presupuesto comunitario. En este sentido, ha afirmado que su país no acepta una subida tan elevada de su contribución financiera. La ministra de Finanzas, Magdalena Andersson, ha rechazado las cuentas que exigen un incremento del 35% de su aportación debido a la salida de Reino Unido. Los países exigen a la UE que rebaje su Presupuesto en el mismo porcentaje que aportaban los ingleses.

«Esta propuesta no es razonable. No podemos aceptarla», aseguró Andersson, quien argumentó que Suecia ya ha contribuido con una «enorme cantidad» al presupuesto comunitario, tanto como «contribuyente neto a la UE» como al asumir una «responsabilidad desproporcionada» en la crisis de los refugiados. Según los cálculos de Estocolmo, la propuesta de la CE de elevar el presupuesto al 1,11 % del producto interior bruto (PIB) comunitario -frente al 1 % de los marcos financieros previos- implica que Suecia tendría que aportar 15.000 millones de coronas suecas (1.414 millones de euros) extra.

Andersson agregó que estaba a favor de algunas de las propuestas contenidas en el presupuesto, como la idea de reducir las ayudas a estados miembros que debilitan el estado de derecho, pero que Suecia quería una reducción del presupuesto comunitario. «Va a haber una negociación extremadamente dura», dijo la ministra de Finanzas, que auguró que no habrá una «solución fácil».

Alemania, dispuesta a dar 10.000 millones más, pero afirma que es una «carga muy elevada»

Los ministros de Finanzas y Exteriores, Olaf Scholz y Heiko Maas, aseguraron en un comunicado conjunto que Alemania está «preparada» a asumir su «responsabilidad» en el «refuerzo de la UE» y contribuir con 10.000 millones de euros más al año (siempre que se dé un reparto «justo de las cargas entre todos los países socios»). «La propuesta de la CE elevaría la carga de Alemania de forma notable», asegura la nota.

Esos 10.000 millones, explicó Scholz en una rueda de prensa, se han estimado teniendo en cuenta la actual fórmula de cálculo del presupuesto europeo -el 1% del producto interior bruto (PIB) de la UE- y que, tras el ‘brexit’, ya no aportará Reino Unido al presupuesto común.

El Gobierno alemán, agregaron Scholz y Maas, estudiará ahora la propuesta y lanzará su posición en el marco de las negociaciones entre los socios con el objetivo de «reforzar sosteniblemente» la «capacidad de negociación» de la UE.

«Por eso, apostamos con fuerza por una modernización fundamental de los gastos de la UE», afirman. La UE, prosigue el texto, «debe establecer las prioridades correctas en su próximo presupuesto y destinar consecuentemente sus fondos al valor añadido europeo».

Entre estos puntos clave se encuentran «una mejor protección de las fronteras exteriores de la UE» y la «cooperación en política de Defensa». «Para un verdadero cambio, la UE debe elevar su capacidad de innovación, proteger mejor a sus ciudadanas y ciudadanos tanto dentro como fuera», apunta el comunicado de Scholz y Maas. Ahora es preciso llegar «cuanto antes» a un «resultado común satisfactorio» para todas las partes, lo que implica «intensas conversaciones» con el resto de estados, la CE y el Parlamento Europeo.