Iberaval reducirá este año un 20 por ciento sus emisiones CO2
Iberaval potenciará su política de sostenibilidad tras obtener esta semana el Sello de Huella de Carbono que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, tras incorporarse al Registro Nacional de Huella de Carbono, que incide en el compromiso de lucha contra el cambio
climático. Se convierte, además, en la primera sociedad de garantía de España que lo consigue.
El sello, que el Ministerio ha concedido este martes a Iberaval, reconoce la medición llevada a cabo por la sociedad de garantía (SGR) con mayor volumen de actividad en España, que a partir de ahora deberá reducir las emisiones derivadas de su funcionamiento y, en su caso, compensarlas.
La incorporación en el Registro ha tenido lugar en el mismo día en que el Consejo de Ministros ha aprobado el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transmisión Energética, que tiene por delante su tramitación parlamentaria en las Cortes Generales.
Iberaval ha contado con uno de sus socios, la empresa palentina Omawa Huella Ecológica, que analizó durante el cuarto trimestre de 2019
los diferentes parámetros que se exigen para calcular la huella de carbono. De esta manera, tras visitar todas las instalaciones de Iberaval y
analizar locales y usos, así como los datos de consumo referidos a 2018, se ha obtenido como resultado unas emisiones totales referidas a ese año
de 53,11 toneladas de dióxido de carbono (CO2) equivalente. Ese cálculo se ha hecho en base a los datos obtenidos a partir del gasto en combustibles fósiles, como gasolina de los vehículos utilizados por miembros de la organización, consumos de los equipos de climatización y refrigeración u otras energías, como electricidad o gas en las sedes de la sociedad de garantía.
Partiendo de que Iberaval contaba, al cierre de 2018, con 27.300 socios, se deduce que se emiten 1,94 toneladas de dióxido de carbono por cada mil asociados. Una vez se ha realizado este trabajo de campo, Iberaval ya tiene un punto de partida para reducir su impacto climático, una de las exigencias que plantea la consecución del Sello distintivo que otorga el Ministerio.
Concretamente, Iberaval se plantea reducir las emisiones de CO2 en 2019 -dato global que se conocerá en los próximos meses- con respeto al año
base de cálculo, que es 2018. Para lograrlo, la SGR ya ha implementado diferentes medidas que harán más fácil alcanzar ese objetivo, entre ellas
mejora de instalaciones o reducción de consumos energéticos.
El objetivo en 2020 es aminorar un 20 por ciento esas emisiones, mientras que para 2030, Iberaval aspira a rebajarlas un 40 por ciento.
La inscripción de Iberaval en el Registro viene acompañada de un Plan de Reducción que detalla las acciones que impulsará Iberaval para
rebajar la emisión propia de gases de efecto invernadero. Tras verificar la viabilidad de ese Plan, el Ministerio ha concedido este Sello.
La información contenida en el Registro es accesible para todo el mundo y en ella se puede ver la evolución real de la Huella de Carbono de
empresas e instituciones.
El compromiso adoptado supone no solo una mejora en la sostenibilidad de la empresa, sino que también permite actuar en contra
del cambio climático sin disminuir la calidad de los servicios prestados, con el propósito final de llegar a trabajar en Carbono Neutro
compensando la Huella de Carbono en su totalidad. Se trata, en definitiva, de una muestra más del compromiso de la SGR con origen en Castilla y León con las políticas de Desarrollo Sostenible y Responsabilidad Social Corporativa. Esta iniciativa está alineada con la incorporación efectiva de
Iberaval al Pacto Mundial de Naciones Unidas, firmado en noviembre del pasado año, en el que la SGR se sumaba a las más de 1.500 entidades que
forman parte de la Red Local Española.