La Comunidad asume la vicepresidencia de la Sectorial de Ciencia e Innovación

El consejero de Economía y Hacienda de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, pidió este lunes al ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, “fortalecer” el papel de la administración en la investigación en el mundo rural a través de tres sectores “imprescindibles” para la Comunidad como son el agroalimentario, el sociosanitario y el de las pymes y micro pymes. A su juicio, en esos ámbitos se necesita un fortalecimiento de la innovación y la ciencia “desde el punto de vista de lo público”.

Fernández Carriedo realizó estas declaraciones tras asistir a la Conferencia Sectorial de Ciencia e Innovación en la que Castilla y León asumió la vicepresidencia durante un año y en la que, por lo tanto, el “papel” de la comunidad autónoma “tiene que ser y va a ser relevante”.

El consejero, que tuvo una “buena sintonía” con el ministro Duque, aseguró que la comunidad “puede aportar cosas y también beneficiarse” de la nueva Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación, que entrará en vigor el año que viene y que debe ser aprobada por este mismo Consejo antes de que finalice 2020.

Así, dijo, hay tres sectores “imprescindibles” para Castilla y León que podrían verse beneficiados. En concreto, señaló, el sector agrario y agroalimentario, en el que se podría “fortalecer” el papel de la ciencia y la innovación. De la misma manera, considera que pasa “algo parecido” con el sector sociosanitario en el que nuestra comunidad “tiene un potencial muy relevante por su elevada cualificación y formación”.

Y, en tercer lugar, el sector de las pymes y micro pymes que constituye “otro elemento propio de nuestra comunidad” y en el que se necesita mayor “tecnología y digitalización”. Según Carriedo hablamos de la “bioeconomía”, de la “ciberseguridad” y de otros ámbitos “donde Castilla y León podría ejercer un liderazgo nacional”.

Ahí, explicó, se necesita un fortalecimiento de la innovación y la ciencia “desde el punto de vista de lo público” ya que, explicó, en determinados sectores como el del automóvil, donde nuestra comunidad tiene un papel importante, “el papel corresponde a veces a las grandes empresas”. En ese sector, añadió, “el papel de liderazgo en la introducción de la innovación corresponde más a las grandes empresas que a la administración”.

Esa apuesta del sector privado ha conseguido, dijo, que Castilla y León “se sitúe entre las comunidades con mayor nivel de inversión en I+D+i, por encima de la media española, y entre las cinco que tienen un mayor nivel de recursos destinados a investigación en relación a su PIB y entre las tres que más si excluimos las dos de régimen foral”.

Ahora hace falta un empuje desde el sector público con más fondos “por parte de los dos”, tanto el Estado como la propia comunidad de Castilla y León. Según dijo, se trata de “aprovechar al máximo los fondos del Estado” dirigiéndolos a los elementos que tienen presencia en el mundo rural, y “fortalecer también los que aporta Castilla y León”.

Además del dinero, añadió el consejero, se necesita “mejorar nuestros mecanismos de coordinación y organización” ya que en ocasiones algunas pymes y micro pymes del ámbito rural que tendrían capacidad de investigar “no siempre lo hacen por no tener la información adecuada”, por “no llegar a ellos” o “por no saber comprender el lenguaje mutuo que tenemos ambas partes”.

Habría que hacer un “esfuerzo” por entendernos más, las micro pymes para saber que se pueden beneficiar de la investigación y los que investigan para conocer “qué innovación sería más aplicada y más práctica en función de las necesidades reales que demandan la sociedad y el mercado”.