La Junta firma un protocolo para mejorar la accesibilidad a las viviendas
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, firmó esta mañana un protocolo de colaboración con Aspace, Impulsa Igualdad, Cocemfe y la Federación de Autismo de Castilla y León con el objetivo de mejorar la accesibilidad en viviendas y hacerla universal en las políticas públicas de vivienda.
Suárez-Quiñones recordó que la Ley de Vivienda autonómica desarrolla el derecho a la accesibilidad en cualquier ámbito de la vida que recoge Estatuto de Autonomía, ya que impone a la propia Junta impulsar medidas de accesibilidad en las viviendas, a la vez que destacó que el Gobierno autonómico viene trabajando en esta materia mediante ayudas públicas y actuaciones en las Áreas de Regeneración Urbana.
En este sentido, recalcó que desde 2013 la inversión en esta materia de accesibilidad asciende a 63,2 millones de euros, cantidad a la que se sumarán hasta el 2025 otros 41,9 millones.
Con relación al protocolo, el consejero explicó que las cuatro asociaciones firmantes forman parte del proyecto europeo Rumbo, iniciativa en la que participan un total de 22 entidades de otras comunidades como Galicia, Aragón, Andalucía y Cataluña, y que tiene como objetivo desarrollar nuevos modelos de autonomía personal e independencia de proyectos de vida en personas diversidad funcional y que también conlleva la búsqueda por parte de las entidades del tercer sector de la colaboración de instituciones públicas.
Así, Suárez-Quiñones explicó que los objetivos del proyecto Rumbo y la iniciativa política de la Junta en esta materia confluyen en el protocolo rubricado hoy, que se buscan sumar esfuerzos para mejorar la calidad de vida de las personas con diversidad funcional y buscar su total integración en la sociedad.
El protocolo establece impulsar el acceso a la información sobre vivienda accesible, llevar a cabo estudios sobre nuevas medidas de accesibilidad universal en el uso de las viviendas, tanto en las libres, como en las protegidas y de promoción pública, y concienciar a la ciudadanía y al sector de la construcción de que es necesario cumplir estrictamente la normativa en materia de accesibilidad.
Por su parte, la presidente de la Asociación Autismo de Valladolid, Concepción Galván, coincidió con el consejero que objetivo final tanto del proyecto Rumbo como del protocolo firmado hoy con la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio es mejorar la calidad de vida de las personas con diversidad funcional. En este sentido explicó que la adaptación y accesibilidad de las viviendas es fundamental a la hora de alcanzar la autonomía personal de las personas con discapacidad.
A su vez, recordó que la accesibilidad universal se compone de aspectos cognitivos, físicos y sensoriales, por lo que se trata de que las viviendas estén adaptadas y conectadas. En este sentido, explicó que además de rampas y puertas más amplias para que pueda pasar una silla de ruedas, también hay que instalar sensores lumínicos y otro tipo, dado que deben ser viviendas conectadas telemáticamente que incorporen las nuevas tecnologías. Además, en el aspecto cognitivo apuntó medidas como la utilización de pictogramas para facilitar el acceso a las distintas dependencias.