La Junta podría llevar a Puente a los tribunales por la supresión de 346 paradas de bus
ICAL
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, se mostró hoy dispuesto a “ir a los tribunales” para “defender a la gente de nuestra tierra y nuestros pueblos” frente a la supresión de 346 paradas de los autobuses interurbanos en Castilla y León que, aseguró, va a llevar a cabo el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, dirigido por el vallisoletano Óscar Puente.
Según Fernández Mañueco, el nombramiento de Puente ya fue un movimiento del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “para avergonzarnos a todos” los castellanos y leoneses, algo que, a su juicio, se demostró en el momento en el que el ahora ministro de Transportes “nos llamó geriátrico a cielo abierto, despreciando a nuestros mayores”.
Ahora, tal y como apuntó el presidente de la Junta en un acto de campaña en Laguna de Duero al que acudió como máximo mandatario del Partido Popular en Castilla y León, “ha explicado el nuevo mapa de transporte interurbano” que supone “un nuevo palo” para la Comunidad, ya que “va a suprimir 346 paradas en pueblos de Castilla y León”.
En concreto, Fernández Mañueco se refirió a la situación de la provincia de Valladolid, de la que procede Puente, donde esa supresión afecta a 24 paradas, lo que va a “dejar tirados a 32.000 habitantes”. Un “desprecio infame”, como lo calificó el presidente de la Junta, que aseguró que no lo van “a consentir”, acudiendo en primer lugar al Congreso, al Senado, a las Cortes de Castilla y León, a las diputaciones y a los ayuntamientos para intentar frenarlo e incluso llegando a “los tribunales” para “defender a la gente de nuestra tierra y nuestros pueblos”. “Le vamos a decir ‘no’ a Puente”, concluyó.