Los 177 economistas de Podemos: asesores de Iglesias y seguidores de Keynes

Los 177 economistas de Podemos: asesores de Iglesias y seguidores de Keynes

20 junio, 2016
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Actualizado: 20 junio, 2016 15:16
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Unidos Podemos ha conseguido 177 apoyos para tratar de parar el informe de la banca internacional, que advierte del riesgo para España y la Eurozona de un Gobierno con Pablo Iglesias.

Los riesgos para España pasarían principalmente por la subida de Podemos, con el PSOE a la baja. De esta forma, según el informe lanzado a inversores internacionales, la banca ve un Congreso fragmentado, por lo que la lucha para reducir el déficit sería muy complicada, al tiempo que ven correr peligro a las reformas realizadas por España para crear empleo y crecimiento.

«En el hipotético caso de que Podemos obtenga resultados mejores de lo previsto e incluso alcance el Gobierno, esto puede incluso llevar la economía española a la recesión», recoge el informe de 46 páginas de Morgan Stanley, que concluye: el próximo Ejecutivo «ni sería estable, ni apostaría por reformas».

El BCE alerta: «Este escenario deja a España en situación vulnerable a ataques de aversión al riesgo con consecuencias potencialmente negativas para la economía española».

A juicio de Citigroup, «la incertidumbre política, el riesgo no resuelto de independencia de Cataluña y el considerable desvío presupuestario de 2015 hacen que los valores bursátiles españoles sean vulnerables a un deterioro adicional, especialmente si el riesgo de salida de Reino Unido del euro mantienen en alerta a los mercados».

Ante estas advertencias, la coalición Unidos Podemos trata de contrarrestar las alertas lanzadas desde algunas entidades bancarias ante los riesgos que provocaría un Gobierno de Podemos. En concreto ha recabado 177 firmas de economistas de todo el mundo, pero todos tienen un punto en común: Keynes y políticas de izquierda.

El manifiesto «Poner punto y final a las políticas de austeridad en España para abrir un nuevo tiempo en Europa» lleva la firma de economistas como Thomas Piketty (el economista de referencia de la izquierda a nivel global), Ann Pettifor (quien espera que se juzgue a banqueros por manipulación de índices como el Euríbor o el líbor), James Galbraith (ex asesor de Yannis Varoufakis, el ministro de Economía que dejó a Grecia en el corralito), Marina Subirats (cuyo artículo «Podemos: una propuesta inclusiva» es casi obligatorio en los círculos podemitas), Robert Pollin (asesor de Podemos), Carlos Berzosa (rector de la Complutense) o Vincenç Navarro (uno de los asesores económicos de Podemos y cuyas medidas están integradas en el programa económico de la formación de Pablo Iglesias), entre otros, que muestran su apoyo explícito a Unidos Podemos de cara a las elecciones del próximo domingo.

De esta forma, casi ninguno de los economistas firmantes tiene relación alguna con la formación.

El manifiesto apunta que es necesario un «cambio de política económica» en España y Europa, mientras considera que el programa económico de Unidos Podemos «es capaz de conjugar con solvencia y rigor los desafíos del presente y los retos del futuro», y que servirá además para «poner punto final a las políticas de austeridad en nuestro país y abrir así un nuevo tiempo en Europa.

Tanto el candidato de Podemos a la Presidencia del Gobierno, Pablo Iglesias, como su responsable de Economía, Nacho Álvarez, han agradecido en declaraciones a los medios en el Congreso que estos economistas pongan su «solvencia y rigor» al servicio de la causa que defiende Podemos.

Álvarez ha hecho hincapié en que, ante la incertidumbre provocada por el «brexit» en la UE, hay que lanzar un mensaje claro, que es la necesidad de terminar con las políticas de austeridad en España y en Europa.

El secretario general de Podemos ha recordado que organismos como el FMI o la OCDE han admitido que las políticas de recortes han sido un «fracaso» y han abogado por otro tipo de medidas. Asimismo, Iglesias ha defendido las políticas del presidente de EE.UU., Barack Obama, de los últimos años orientadas a la expansión fiscal, en línea con lo que también proponen gobiernos como el portugués o el italiano.

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