Los “otros Bitcoins” menos conocidos y sus ventajas

Todo el mundo conoce “los Bitcoins” y, prácticamente, las otras criptodivisas de más fama, como el Ethereum, el Bitcoin Cash o el Litecoin. Estas criptomonedas están en boca de todo el mundo en los últimos tiempos y la inversión en estos elementos se está convirtiendo en un elemento cada vez más popular. Tanto es así que el precio de muchas de estas monedas electrónicas —aunque, especialmente del Bitcoin, se ha disparado durante el 2017— ya ha superado los límites que muchos pequeños inversores se pueden permitir.
Por ello, a continuación, te dejamos algunas de las otras opciones del mercado de las criptomonedas que todavía se encuentran por debajo (o, de haberla superado, muy cerca) de la barrera de los 1.000 dólares por unidad. Todas ellas, además, cuentan con una característica o rasgo que juega muy a su favor a la hora de discernir cuál o cuáles serán las criptodivisas del futuro.
Monero, ¿divisa para traficantes o una buena inversión?
Monero se ha convertido en una de las divisas más polémicas de los últimos tiempos, en gran parte debido a la utilización que algunos sectores están haciendo de ella. Pese a todo, y aunque Monero nunca va a ser la divisa más famosa del mundo —principalmente, porque no fue diseñada para ello—, sí es cierto que puede convertirse en una buena opción de inversión, siempre y cuando aceptes su “mala fama”.
El principal y más destacado valor de Monero es su fama, así como también las características que la han convertido en la moneda electrónica favorita de los traficantes de droga y armas en la deep web. Tal y como explica en un reportaje de eldiario.es Alberto Gómez Toribio, director de tecnología del startup especializada en criptodivisas Clluc, “a pesar de que Bitcoin se empezase a usar en la “deep web”, porque no es necesario dar tu nombre y apellidos para tener un monedero de “bitcoins”, lo cierto es que no fue diseñada para eso. Sin embargo, Monero sí”.
Esto, así como generar muchísima polémica alrededor de esta divisa, también ha hecho que aumente su valor en base a la ley de la oferta y la demanda. Una buena opción, siempre y cuando no te importe su lado oscuro.
Dash, ¿el sueño incumplido de Satoshi Nakatomo?
Según reza la leyenda de Satoshi Nakamoto, el misterioso creador de Bitcoin del que todavía no se ha conocido su identidad real, la criptomoneda por excelencia fue creada como un intento de sistema de pagos peer-to-peer y descentralizado que acabase con el oligopolio del sistema financiero mundial. Sin embargo, el Bitcoin se ha acabado por convertir más en una especie de valor refugio o sistema de almacenamiento de valor.
En la pugna por llegar a cumplir el sueño de Nakamoto, hoy en día contamos con dos candidatos principales: el Bitcoin Cash y el Dash. Esta última, aunque tiene una cotización menor en estos momentos, cuenta con potentes argumentos a su favor: la descentralización y el sistema peer-to-peer se mantienen intocables, mientras que cuenta con un método de gobernabilidad que puede ayudar enormemente a su candidatura. ¿Lo conseguirá? Pronto lo sabremos.
Ripple, el “arma” del sistema financiero
Los puristas de las criptomonedas no se fían de ella y los inversores financieros de toda la vida confían mucho dinero a su progresión. Esa es Ripple, la criptomoneda contracultural o del sistema, según se quiera ver, que se ha convertido en el arma de los principales actores del sistema financiero de toda la vida para combatir al Bitcoin. Por esta confianza de los poderes financieros, quizás, merece la pena echarle un ojo a una criptodivisa que puede acabar por controlar el mercado en unos años.
El planteamiento de Ripple es sencillo: adapta un gran número de las características de las otras criptomonedas, pero lo hace de una forma más controlada y no tan descentralizada o libre. Así, pretende convertirse en el método de pago del futuro sin tener que quitarle su actual poder a los grandes popes del sistema financiero. Una apuesta arriesgada, sin duda, y que ya cuenta con la animadversión de gran parte del sector de las criptomonedas. Sin embargo, no cabe duda de que el Ripple cuenta con aliados muy potentes.