Madrid pasa del Tsunami Democràtic y su llamamiento de bloquear Barajas ni siquiera es marejarilla
lunes 14/10/2019
Actualizado: 14/10/2019 23:35
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La plataforma Tsunami Democràtic ha llamado a «saturar los accesos» el madrileño Aeropuerto de Barajas, después de haber conseguido que miles de personas hayan colapsado las entradas al Aeropuerto de Barcelona-El Prat. Ni un sólo madrileño se acercó a ese llamamiento.

El movimiento ha difundido un comunicado en el que dice que «a través de una acción sorpresa que ha comenzado hace pocos minutos, Tsunami Democrático ha desplazado miles de vehículos en las inmediaciones del aeropuerto de Barajas-Adolfo Suárez con el objetivo de hacer llegar la movilización en repuesta a la sentencia a la capital de España», una mentira más que se suma a la larga lista que acumula el separatismo catalán. Y es que esa afirmación más que lejos que de la realidad está a años luz. Ni un sólo vehículo, salvo los habituales del tráfico normal, se ha acercado a dicha cita del ‘Tsunami Democràtic’, que en Madrid no se ha quedado ni siquiera en marejarilla. Nada de nada.

Tsunami Democràtic ha pedido que todos los ciudadanos madrileños que se sientan «indignados» con la sentencia acudan a la convocatoria para reclamar una «solución política» al conflicto catalán que pase por «el diálogo y la negociación». Pues parece que pocos madrileños se han sentido indignados por la sentencia y menos aún quiere una salida cuya negociación sea dirigida por los separatistas catalanes. Por el contrario, se siente decepcionados por la levedad de la penas ante la gravedad de los delitos cometidos por los separatistas catalanes y los insultos continus y reiterados al resto de los españoles por parte de ese grupo de sediciosos.

«Con esta acción -concluye el comunicado- se quiere trasladar las consecuencias de la represión y de la falta de diálogo al núcleo económico del Estado, haciendo evidente que el conflicto político no sólo afecta Cataluña». Parece que ni siquiera afecta a Cataluña, si no a solo una parte que ha hecho de la desobediencia a las leyes y la violencia su forma de actuar y la sedición su forma de gobernar.