Duro Felguera se desploma en Bolsa tras la querella de Anticorrupción

Las acciones de Duro Felguera se hunden cerca de un 5%, aunque ha llegado a sufrir un varapalo de casi el 10%, tras la querella de la Fiscalía Anticorrupción, que acusa a la propia firma y al presidente de la misma, Ángel Antonio del Valle Suárez, de presuntos delitos de corrupción internacional y blanqueo.

Duro Felguera sufre así un castigo bursátil que le devuelve a los mínimos no vistos desde junio de este año. La querella se dirige también al consejero delegado de Duro Felguera, Juan Carlos Torres Inclán, por presuntos delitos de corrupción internacional y blanqueo de capitales, tras detectar pagos por comisiones y sobornos a políticos venezolanos.

En los primeros compases de la jornada la caída era superior al 3% y se ha acrecentado hasta alcanzar casi el 10%. El mínimo de la sesión se sitúa en los 0,55 euros, según los datos recogidos por este diario, un nivel no visto desde la segunda semana de junio, perdiendo así el soporte de los 0,6 euros por título que ha mantenido durante el verano.

La Fiscalía Anticorrupción ha presentado una querella contra el grupo asturiano Duro Felguera, su presidente, Ángel Antonio del Valle Suárez y otras ocho personas físicas y jurídicas por presunta corrupción en Venezuela y blanqueo de capitales.

La investigación se inició en marzo de 2015 tras detectarse supuestos sobornos de la compañía a funcionarios de Venezuela con el objetivo de conseguir contratos en el marco de nuevos proyectos para hacer frente al crecimiento de la demanda eléctrica de Caracas y su área de influencia.

Anticorrupción, que también dirige su acusación contra el anterior presidente de la compañía, Juan Carlos Torres Inclán, destaca el contrato suscrito en 2009 con la empresa pública Electricidad de Caracas, por un importe de más de 1.500 millones de euros.

Para esto, Duro Felguera “firmó una serie de contratos con entidades y personalidades venezolanas relacionadas con el Gobierno de dicho país” a fin de “encubrir el pago de comisiones o sobornos a funcionarios públicos para que se favorecieran los intereses de dicha mercantil”.

Torres Inclán y del Valle, como responsables, “decidieron entregar” hasta 105 millones de dólares (89 millones de euros) a otro de los querellados, Nervis Villalobos, para que “usara su capacidad de influencia”, en contra del criterio de otros directivos de la empresa.