Escisión e IFM, claves de la junta de Naturgy

Naturgy afronta el 15 de marzo una junta general de accionistas que servirá para ratificar la entrada del fondo australiano IFM en el consejo de administración, si bien la atención estará puesta en el proyecto de escisión de la compañía en dos, anunciado en febrero y todavía con muchos detalles por conocer.

En concreto, la junta de la multinacional energética someterá a votación el nombramiento de Jaime Siles como consejero dominical en representación de IFM, el fondo australiano que lanzó el año pasado una opa parcial sobre Naturgy y que cuenta con un 12,1 % del accionariado.

También ese día se ratificará y nombrará como consejeros a Ramón Adell y a Enrique Alcántara-García Irazoqui, ambos en representación de Criteria, que es el primer accionista de Naturgy, con un 26,7 % del capital y que ahora tendrá tres consejeros, en lugar de dos.

Así pues, el consejo se mantendrá en doce miembros, pero habrá dos independientes menos, al pasar de cinco a tres.

Además de los representantes de Criteria (3) y de IFM (1), integran el consejo también dos consejeros de GIP y otros dos de CVC y la familia March, mientras que el presidente de la compañía, Francisco Reynés, es miembro del consejo en tanto que ejecutivo.

En la presentación de los resultados de 2021 a los analistas, el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, celebró que haya acabado «un año de ruido» en torno a la opa parcial de IFM, que generó fricciones entre este fondo y Criteria.

Superado ese episodio y resuelta la reorganización del consejo, la atención de Naturgy se centra ahora en su proyecto de división de la compañía en dos para crear una compañía centrada en las infraestructuras reguladas (transporte y distribución de energía) y otra en los negocios liberalizados, entre ellos el de renovables, ambas cotizadas.

Con todo, no está previsto que la junta aporte novedades de calado sobre esta escisión, puesto que Naturgy está inmersa en la gestación de este proceso de separación, denominado proyecto Géminis.

El secretario del consejo, Manuel García Cobaleda, explicó en febrero que el proceso de separación se llevará a cabo en tres fases; en la primera, la de análisis del proyecto, Naturgy, con la ayuda de asesores externos, revisará a fondo el diseño de la operación, una labor que estima que podría estar lista en torno al mes de abril.

En la segunda fase se deberán definir al detalle los dos perfiles de las dos nuevas compañías, trabajo que podría culminar en torno al verano.

Y en último lugar corresponderá al consejo de administración convocar en «otoño» una junta extraordinaria de accionistas para dar luz verde a la escisión y, pasados unos dos meses, en torno al mes de diciembre, culminar finalmente la separación formal.

Así pues, aún se debe conocer cómo se reparten la deuda y el personal entre las dos compañías resultantes.

Falta saber también qué nombre tendrán estas dos compañías. De entrada se llaman de forma provisional MarketsCo -Mercados- y NetworksCo -Infraestructuras-.

En cualquier caso, Naturgy ha dejado claro que los objetivos fijados en el plan estratégico diseñado hasta 2025 se mantienen.

La junta también someterá a aprobación la política de remuneración de Naturgy durante los tres ejercicios siguientes y el incentivo a largo plazo del presidente ejecutivo y de otros directivos.

Como es habitual, la junta dará luz verde a las cuentas anuales, que en este caso son las de 2021, someterá a aprobación la gestión del consejo durante el año pasado y también votará la propuesta de aplicación del resultado de 2021.

La junta se celebrará en la sede de Naturgy en Madrid, situada en la avenida de América, 38, aunque también se podrá seguir telemáticamente. De hecho, el consejo de administración ha desaconsejado la asistencia física a la junta y ha recomendado la participación de forma telemática.