JP Morgan y RBC apuestan por Repsol aún con la reducción del 25% de sus beneficios
Algunos inversores como JP Morgan o RBC, han puesto su foco de inversión en la empresa Repsol tras la publicación de los resultados del cuarto trimestre y del ejercicio fiscal 2023 de la empresa Repsol, en donde la compañía experimentó una reducción del 25% del beneficio empresarial. Contrariamente a lo esperado, estos inversores no tienen su atención puesta en las cifras cotizadas de la compañía, sino en la actualización del Plan Estratégico de la compañía hasta 2027 y de la mejora de la rentabilidad al accionista.
Los expertos del banco neoyorquino han actualizado su recomendación sobre los títulos de Repsol, pasando de ‘neutral’ a ‘sobreponderar’, y han ajustado su precio objetivo a 17,5 euros, frente a los 16 euros previos. Este cambio se debe al «fortalecimiento de las condiciones de refino», lo que ha mejorado considerablemente su perspectiva sobre la compañía. Según la valoración de la firma dirigida por Jamie Dimon, desde los últimos precios de cierre, se estima un potencial alcista de más del 20% para la cotizada.
Por otro lado, los estrategas de la firma canadiense mantienen su recomendación de ‘sobreponderar’ para los títulos de la petrolera bajo la dirección de Jon Josu Imaz. Además, han revisado al alza su precio objetivo, pasando de 17 euros a 20 euros.
El equipo de análisis de JP Morgan, liderado por el analista jefe Matt Lofting, señala a Repsol como su «midcap preferida» en el mercado petrolífero de la Unión Europea (UE), junto a otros grandes competidores como Shell, Eni o Total Energies.
JP Morgan indica que Repsol ha colocado la rentabilidad en efectivo
Destacan que el compromiso de Repsol de mantener la inversión neta entre 16.000 y 19.000 millones de euros hasta 2027 «mitiga posibles contingencias asociadas con una mayor inversión bruta (antes de desinversiones)» y sugiere que un exceso de efectivo en escenarios de superciclo podría generar aún más efectivo.
JP Morgan indica que Repsol ha colocado la rentabilidad en efectivo y el valor en el centro de su estrategia de crecimiento multienergético, aprovechando su posición de liderazgo en el mercado ibérico. Específicamente, Repsol planea destinar alrededor de 10.000 millones de euros a dividendos y recompra de acciones en los próximos 4 años, ofreciendo así una rentabilidad que es «demasiado buena para ignorar».
«La rentabilidad en efectivo aumenta hasta un máximo del sector del 14,5-17%. Aplicando el punto medio de una política de distribución del 25-35% del flujo de cajo operativo (CFO, por sus siglas en inglés), a partir de 2025, se obtiene una rentabilidad media del 14,5% en el horizonte 2024-27 a 80 dólares/barril. Un escenario máximo del 35% (que Repsol ha mostrado propensión a desplegar) lo eleva a un espectacular 17%, comparado con el alrededor del 12% medio del sector europeo», explicaron desde la compañía.
Además, JP Morgan resalta que el refino podría actuar como un catalizador a corto plazo para Repsol. Esto se debe a que los márgenes han experimentado un repunte y las dificultades en el transporte marítimo del Mar Rojo podrían empeorar la escasez de productos petrolíferos en la Unión Europea.