Las subvenciones no son la solución; la bajada de impuestos sí, advierte Bankinter al Gobierno

La consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, aboga por bajar impuestos en España como plantea el nuevo líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y considera «claramente insuficientes» las medidas adoptadas por el Gobierno para hacer frente a la situación económica y el aumento de la inflación.

«Lo que han hecho es dar subvenciones», en alusión a la rebaja del precio de los carburantes, que proceden de impuestos, así que representan gasto y van a incrementar el déficit y la deuda pública. «No es lo adecuado», ha argumentado en la rueda de prensa virtual de presentación de resultados.

Además, también ha afeado que el Gobierno revalorice las pensiones por el alza del IPC al tiempo que a las empresas le pide que no hagan lo mismo con sus empleados.

«Lo que hace falta en España», en su opinión y haciéndose eco de la tesis del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, son reformas estructurales que incentiven la inversión y dinamicen el empleo, sin pasar por alto que «es muy necesario» un ajuste del gasto público.

Y sobre la propuesta de Núñez Feijóo de reducir impuestos, Dancausa ha querido dejar claro que no entra en política, pero se ha mostrado de acuerdo con la afirmación de que habría que bajarlos y ha defendido que «la única forma de recaudar más y de manera sostenible no es creando nuevos impuestos, sino haciendo que las empresas y familias ganen más».

Respecto a la futura evolución de Bankinter, la máxima ejecutiva de la entidad se muestra convencida de que a finales de 2023 el banco será capaz de ganar 550 millones al año, como lo hacía antes de la pandemia, cuando aún incluía en sus cuentas a Línea Directa.

Ni siquiera está preocupada por la evolución de la morosidad ante una desaceleración de la economía española por la guerra en Ucrania y la inflación o un posible impago de los préstamos concedidos a empresas con aval del ICO durante la crisis del coronavirus porque, según sus palabras, se han dado «con mucha cabeza».

La exposición del banco a Rusia o Ucrania es cero y en las últimas semanas, desde que comenzó la guerra, a pesar del incremento de los ciberataques informáticos, Bankinter no ha sufrido ninguno.