Ni nucleares, ni petróleo, ni gas, ni… los ecologistas cargan contra los parques eólicos

La asociación ecologista Adega y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica han señalado este lunes que iniciarán acciones legales contra una treintena de proyectos eólicos en Galicia para así paralizar «el modelo eólico depredador» de la Xunta en la comunidad. Los ecologistas se posicionan así contra la energía eólica, como lo hacen con otras fuentes de energía indispensables para mantener un nivel de vida aceptable, como la nuclear, el gas o petróleo… quizás abría que volver a alumbrase con velas y viajar a lomos de mulos, aunque quizás eso sería maltrato animal.

En una rueda de prensa celebrada en Santiago de Compostela, tras el pronunciamiento del Tribunal Superior de Justicia de esta comunidad que anula la autorización a Greenalia para el proyecto eólico de Campelo, entre Coristanco y Santa Comba, los representantes de Adega han señalado que van a recurrir todas las ilegalidades que perciban en el desarrollo de parques eólicos.

«No vamos a recurrir por sistema», ha matizado el representante jurídico de Adega, Fernando de Abel, que ha añadido que estudiarán cada proyecto de forma individual y analizarán «cada caso» porque «no están en contra de la descarbonización» pero sí del modelo eólico implantado por la Xunta.

El portavoz ha constatado que en los 75 proyectos promovidos en los últimos meses han sido detectadas «cuestiones similares» que llevarían a impugnar esos parques, entre ellas la «fragmentación artificial» de los proyectos.

Los parques eólicos en Galicia, amenazados

La sentencia de anulación del Tribunal Superior podría sentar precedente y afectar a muchos otros proyectos que atentan contra el medio ambiente y que se están desarrollando fuera de la ley.

Así lo ha afirmado el portavoz de la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica, Ernesto Díaz, que ha dicho que la sentencia «puede tener connotaciones en muchos otros proyectos en tramitación en todo el Estado».

En su sentencia, ha considerado todos los argumentos esgrimidos por la asociación ecologista para la anulación del parque eólico de Campelo, que incluyen un supuesto de fragmentación artificial ilegal, que impide una correcta evaluación ambiental; la vulneración del trámite de información pública, que se desarrolló durante 15 días en lugar de durante 30, como indica la ley, y la no publicación y puesta a disposición de la ciudadanía de los distintos informes sectoriales.

Aunque la sentencia solo se refiere al parque eólico de Campelo, desde Adega esperan que el Tribunal dicte en el mismo sentido en lo relativo a los otros dos parques. Tras este pronunciamiento, la Xunta decidió recurrir al Supremo.