Prisa pierde 13 millones con una deuda, pese a los convertibles, que supera los 720 millones de euros

Prisa perdió 12,9 millones de euros en 2022, pese a unos ingresos de 850 millones de euros, lo que supone un 15% más que en 2021, una cifra por encima de la horquilla fijada a comienzos de ejercicio, de entre 770 y 800 millones. El resultado bruto de explotación (EBITDA), excluyendo indemnizaciones, superó los 147 millones, un 38% más que en 2021. El margen de EBITDA alcanza el 17,3% y mejora 3 puntos porcentuales respecto a 2021.

Pese a esos buenos datos, Prisa pierde por segundo año consecutivo dinero, aunque ha logrado reducir las pérdidas de los 106,5 millones de euros a los 12,9 millones y su gran problema sigue siendo la deuda, incluso teniendo en cuenta la última emisión de obligaciones convertibles cerrada ya en 2023, que apenas ha supuesto una pequeña reducción sobre la que tenía acumulada en 2021. La deuda neta de Prisa se situaba al cierre de diciembre de hace dos años en 756 millones, 80 millones más que en 2020. La refinanciación de la deuda en abril de 2022 y el lanzamiento de la emisión de 130 millones de euros en obligaciones convertibles, que concluyó a comienzos de este 2023, solo han logrado reducir la deuda financiera neta en 27,6 millones de euros desde el cierre de 2021, de los 756 millones a 728,4 millones de euros actuales.