Ministro de Interior belga ordena levantar bloqueo de camiones en carreteras

Bruselas, 6 abr.- El ministro de Interior belga, Jan Jambon, pidió hoy a la Policía que levante el bloqueo que mantienen varios camioneros belgas en varios puntos de las autovías del sur del país en protesta por un nuevo impuesto de circulación, una reacción que calificó de «salvaje» e «inaceptable».

Jambon ha anunciado que tras varios días de bloqueo, se ha dado la orden a la Policía federal de despejar las barreras creadas por los camioneros, según ha explicado en un mensaje en la red social Twitter.

El ministro de Interior también indicó que se ha activado la «fase federal de gestión de crisis», lo que permite una mejor coordinación de las acciones que se tomen ahora por parte de las autoridades centrales y los gobernadores de las provincias de Valonia, la región afectada.

«Son acciones salvajes, inaceptables e intolerables, a la vista de los problemas de aprovisionamiento que están causando, notablemente respecto a los servicios de emergencia y de los colectivos sensibles, como los hospitales o los centros médicos», afirmó Jambon en una rueda de prensa, según la Agencia Belga.

Ante la situación, el ministro de Transporte del vecino Luxemburgo, François Bausch, pidió hoy a sus homólogos belgas federales y regionales que «intervinieran para resolver esta crisis lo antes posible, para evitar el empeoramiento de la situación».

«Ésta no solamente entraña problemas de organización y financieros para las empresas de transportes por carretera de Luxemburgo, sino que también amenaza con afectar a la economía luxemburguesa y el aprovisionamiento» del país, dijo Bausch en un comunicado.

Los transportistas belgas protestan contra un impuesto por kilometraje a los vehículos de más de 3,5 toneladas que entró en vigor el viernes, una medida impulsada por el responsable valón de Presupuesto, Christophe Lacroix, y que ha causado malestar entre los profesionales.

Desde hace días los camioneros belgas bloqueaban varios puntos de la región de Valonia en señal de rechazo al impuesto, que consideran una «catástrofe» para las pequeñas empresas.

Exigen una reducción del 50 % de la tasa para las compañías de menos de veinte camiones.

Los transportistas aseguran que el impuesto les pone en desventaja respecto a sus colegas de Europa del Este, por ejemplo.

La acciones consisten en el bloqueo de los vehículos pesados que entran y circulan en el país, aunque se ha liberado una vía para que los conductores de automóviles puedan seguir circulando. EFE