Una muestra exhibe al ilustrador Manolo Millares más indigenista y político
Las Palmas de Gran Canaria, 11 feb.- Aspectos poco tratados de la trayectoria de Manolo Millares, como su apego a la corriente de indigenismo canario que lideró Felo Monzón o la determinación política que le llevó a burlar la censura se muestran desde hoy en una exposición que muestra su faceta de ilustrador.
Hoces y martillos introducidos casi como esbozos entre grupos de personas que pintó y publicó en revistas obreras en los años cuarenta del siglo XX sin advertirlo los censores franquistas y estampas de mujeres campesinas de marcados rasgos que se confunden con cuadros de Felo Monzón son algunas de las imágenes de esa muestra, instalada en su ciudad natal, Las Palmas de Gran Canaria.
«Manolo Millares ilustrador. Divertimentos de intimidad» es su título, producida por la Fundación Mapfre Guanarteme, que reúne un centenar y medio de obras de variada naturaleza, desde pinturas, grabados o viñetas periodísticas a caricaturas y retratos dedicados a familiares o dibujados para adornar la correspondencia que mantuvo con sus seres queridos.
Creaciones menores, ensayos de infancia y juventud del que luego se convertiría en pintor universal y trabajos hechos por entretenerse o para entretener figuran entre las piezas que conforman su catálogo, muchas de ellas inéditas para el público, según ha destacado al presentarlas la comisaria de la exposición, Laura García.
García ha relatado que la iniciativa surgió a partir de investigaciones que inició en 2012 en torno a la labor de ilustrador de Manolo Millares después de encontrar varios trabajos suyos casualmente, «mientras estudiaba otros temas canarios».
Toparse con «un volumen importante de ilustraciones y dibujos», muchos desconocidos u olvidados con el tiempo, la llevó a la conclusión de que a partir de ellos podría abrirse «una nueva perspectiva» de análisis de la obra y la personalidad del artista, por lo que decidió dedicarse a estudiarlos «en profundidad», ha añadido.
El resultado de esa investigación es una colección de obras variopintas, desde cuadros a páginas de periódicos con historietas salidas de su lápiz, revistas caseras hechas a medias con parientes suyos o recreaciones pictóricas de poemas que, sumadas a testimonios de allegados y compañeros de Millares, aportan un punto de vista novedoso para «aproximarse a sus procesos perceptivos», ha dicho.
Y ha destacado que esa perspectiva «le vincula fuerte y constantemente a la literatura desde sus autoimpuestas responsabilidades vitales», que le llevaron a ilustrar textos diversos «desde que tenía nada más que diez años» y a insistir en esa forma de creación a lo largo de su vida.
Además, Laura García, especialista en Historia del Arte, ha planteado que la exposición permite ahondar en el conocimiento de aspectos de la personalidad y del devenir artístico del pintor, como un anticlericalismo declarado del que da muestras en distintos dibujos ya desde su juventud o una militancia política comunista que siempre le acompañaría.
Elementos todos ellos que contribuyeron a conformar el carácter y el discurso de un artista que, según ha subrayado, apostó por la abstracción como «expresión libre» y por el rescate de la identidad canaria influido por su familia, de tradición cultural y libertaria y sometida a represalias por el franquismo, y en un afán por oponerse a la dictadura y a las limitaciones que imponía. EFE