La oposición lusa ataca al Gobierno por plantear un presupuesto inverosímil

Lisboa, 1 feb.- El principal partido en la oposición en Portugal atacó duramente hoy al Gobierno socialista por presentar a Bruselas un borrador de presupuestos que calificó de inverosímil, al tiempo que alertó de los riesgos que corre el país.

El vicepresidente del Partido Social Demócrata luso (PSD, centro-derecha), Marco António Costa, consideró que el documento está «completamente muerto» en términos de «credibilidad técnica y política», según señaló a los medios.

«Es un factor de desconfianza hacia nuestro país (…) Y ya sabemos que serán los portugueses los que pagarán esta broma de mal gusto», lamentó.

El dirigente socialdemócrata reclamó al Ejecutivo que haga públicas «qué medidas tiene (guardadas) en la manga para superar esta situación de impasse» en la que están los Presupuestos Generales del Estado para 2016, que todavía deben ser debatidos y aprobados por el Parlamento portugués.

Las críticas del PSD se produjeron en el mismo día en que la Comisión Europea (CE) reconoció la existencia de «grandes diferencias» en las negociaciones que mantiene Bruselas con el Gobierno portugués sobre el borrador presupuestario.

Los socialistas llegaron al poder hace dos meses gracias a un acuerdo inédito alcanzado con el resto de fuerzas de izquierda basado en revertir la austeridad vigente, y para conseguirlo ya aprobaron la retirada progresiva de algunos ajustes y recortes aplicados por el anterior Ejecutivo, de signo conservador.

Sin embargo, estas medidas deben ahora ser incluidas en los Presupuestos, que con anterioridad son presentados a la CE para garantizar que el país cumpla las metas marcadas en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.

Tras una primera consulta, Bruselas reclamó más esfuerzos en materia de reducción del déficit estructural y planteó dudas sobre la sostenibilidad de las cuentas lusas.

Desde el PSD, subrayaron que lo ocurrido demuestra que el Gobierno está «acorralado» entre el acuerdo firmado con la izquierda radical y las responsabilidades exigidas por la Unión Europea (UE). EFE