Pataleta de Sánchez por el freno del Gobierno a la deriva separatista
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, rechaza que el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, vaya a impugnar la Consejería de Exteriores de la Generalitat de Cataluña, que llevará mañana el Gobierno al Tribunal Constitucional. Asimismo, ha exigido a Rajoy que le informe de los pasos del Gobierno, pese a que aún no es presidente ni tiene apoyos suficientes para ser investido.
Sánchez ha realizado esta petición en rueda de prensa, tras reunirse con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, y después de que Rajoy haya anunciado que el Consejo de Ministros aprobará mañana la presentación de un conflicto de competencias en el Tribunal Constitucional (TC) por la creación de la Conselleria de Relaciones Exteriores de Cataluña y que los servicios jurídicos estudian las actuaciones de ayer en el Parlament.
También ha mostrado Sánchez su «honda preocupación» y su rechazo por esos pasos que está dando el independentismo, ya que Junts pel Sí y la CUP registraron ayer las peticiones dirigidas a la Mesa del Parlament para la constitución de las tres ponencias conjuntas para la elaboración de una proposición de ley integral de protección social catalana, una proposición de ley de régimen jurídico catalán y una proposición de ley de la administración tributaria catalana.
A juicio de Sánchez, «sería bueno» que Rajoy consultara al menos con el resto de fuerzas políticas y, sobre todo, «con el candidato designado por el jefe del Estado» las medidas contra esas iniciativas secesionistas. Ha argumentado en este punto que los socialistas han sido «leales» con el PP cuando estaban en la oposición para intentar garantizar la integridad territorial de España.
«Y lo sensato, lo prudente y lo coherente sería que Rajoy consultara e intentara acordar conmigo esa posición«, ha subrayado, antes de aclarar que tendría que hacerlo no porque la posición vaya a ser distinta, sino para corresponder la postura de lealtad del PSOE en estos años.
«Eso no ha ocurrido (…) y exijo a Rajoy que en adelante nos llame para intentar acordar esas líneas de actuación ante un problema que preocupa a todos», ha añadido.
Además, ha recordado que los socialistas defienden «la diversidad de una España unida» y ha advertido a los independentistas de que no pueden seguir poniendo a Cataluña fuera de la legalidad democrática ni quebrando la Constitución.
De hecho, ha expresado su convencimiento de que con la ley y la Carta Magna se podrán «encontrar puentes y soluciones políticas» para resolver «la crisis de convivencia que ahora mismo se está alimentando por parte del independentismo».
El candidato socialista ha reiterado que se reunirá también con DiL y ERC para hablar de la investidura aunque ha precisado que lo hará por respeto a los «no pocos catalanes» a los que representan y aprovechará para instarles a no seguir por ese camino.