El PE pide que hogares desventajados no queden sin calefacción en invierno
Estrasburgo (Francia), 14 abr.- La Eurocámara adoptó hoy una resolución que pide a los países miembros que declaren una «moratoria» a las desconexiones de calefacciones en invierno para que los hogares pobres no queden sin energía, e insta a la Comisión Europea a analizar posibles sistemas de ingresos mínimos en la UE.
El texto no vinculante fue adoptado por 310 votos a favor, 73 en contra y 26 abstenciones.
Los eurodiputados argumentan también que la UE se está alejando más de su objetivo estratégico para 2020 de sacar a al menos 20 millones de personas de la pobreza en los próximos cuatro años.
Consideran que la Comisión debería evaluar si los sistemas de ingresos mínimos en la UE pueden permitir a los hogares hacer frente a sus necesidades básicas.
Los eurodiputados pretenden en este contexto reducir los costes energéticos de las familias y piden más apoyo para las que tienen pocos medios, así como más inversiones en proyectos de eficiencia energética para reducir las facturas energéticas.
«La energía debería ser considerada como un bien esencial en la medida en que nuestra sociedad está cada vez más dependiente de ella», declaró el ponente Tamás Meszerics, de Los Verdes.
En su opinión, disponer de una calefacción adecuada, de electricidad para cocinar y de agua caliente es básico, y por ello «una moratoria a las desconexiones, si la adoptasen todos los Estados miembros, reduciría las muertes y las graves consecuencias en la salud que provocan hogares fríos durante el invierno».
La Eurocámara sugiere que los consumidores tengan acceso a toda la información necesaria para tomar decisiones sobre su consumo de energía y que en paralelo los proveedores incluyan información en sus facturas sobre las formas que tienen los hogares para reducir el consumo y aumentar la eficiencia energética.
Los eurodiputados lamentan además que las normas sobre eficiencia energética y rendimiento energético en edificios no sean empleadas plenamente, especialmente cuando se renuevan proyectos de viviendas sociales mal construidas.
Por ello recomiendan a la Comisión que refuerce la legislación, de manera que los países tengan que incluir objetivos sociales en sus sistemas de eficiencia energética.
Según estadísticas de la UE sobre condiciones de vida e ingresos, el 10 % de los ciudadanos tenían facturas atrasadas de energía y electricidad en 2015 y un 12 % no podían calentar apropiadamente sus hogares en 2014.
Un 16 % de la población estaba residiendo en viviendas con goteras y humedad en las paredes en 2014.
Entre 2008 y 2013, el número de personas desventajadas subió en la UE de 117 millones a 122,6 millones.
Un 16,7 % de la población estaba en riesgo de caer en la pobreza tras hacer frente a transferencias sociales, un 9,6 % estaba en una situación de privación material y un 10,7 % de los hogares tenía una intensidad laboral muy baja. EFE