Pedro Sánchez pone fin a los peajes y asesta un golpe de 3.300 millones a los españoles

El Gobierno socialista de Pedro Sánchez frena el plan de la relicitación de las autopistas de peaje quebradas y el rescate tendrá un coste de al menos 3.300 millones de euros para los contribuyentes. El plan del anterior Ejecutivo era obtener al menos 1.000 millones por las nuevas adjudicaciones.

De no costar un euro a costar al menos 3.600 millones de euros, un montante exigido por los fondos dueños de la deuda de las autopistas de peaje quebradas al Estado mediante la cláusula de Responsabilidad Patrimonial del Estado. El rescate de las nueve autopistas quebradas costará más de los 2.000 millones estipulados inicialmente por el Gobierno de Mariano Rajoy al incrementarse en otros casi 760 millones de euros por las expropiaciones, tras las sentencias judiciales. Las cifras estimadas por el nuevo ministro de Fomento, José Luis Ábalos, alcanzan los 3.300 millones de euros como máximo, y los 2.600 millones como mínimo, ya que se suma el pago de la deuda y las expropiaciones.

Según ha asegurado Ábalos a El País, se ha paralizado por completo la adjudicación de las autopistas de peaje quebradas, un concurso que el Gobierno de Mariano Rajoy iba a realizar en este mes de junio para obtener cerca de 1.000 millones de euros y así reducir la factura del rescate. El PSOE, por contra, ha frenado el plan y va a realizar, además, una auditoría sobre las autopistas de peaje. De esta forma, en estas autopistas ya no habrá que pagar, ni tampoco en las siguientes autopistas del Estado una vez expire el contrato.

Las pérdidas para los contribuyentes se disparan con el Gobierno del PSOE: pagará las expropiaciones y la RPA sin recibir nada a cambio

De acuerdo con el ministro, las cifras que le han trasladado varios responsables de ese departamento es que los ingresos previstos por la licitación son 700 millones y la RPA entre 2.000 y 2.600, frente a los 1.000 millones que esperaba obtener el Ejecutivo anterior y los 1.800 que preveía abonar.

La AP-7 entre Alicante y Tarragona será gratuita una vez expire la concesión, junto con la AP-4 y la AP-1 entre 2018 y 2019

«Hemos decidido que se libere de peaje», ha afirmado Ábalos, en una entrevista en el diario «El País», según el cual esta decisión afecta directamente a tres autopistas (AP-1 entre Burgos y Armiñón, AP-7 entre Alicante y Tarragona y AP-4 entre Sevilla y Cádiz) cuyas concesiones vencen en 2018 y 2019 y cuentan con 468 kilómetros en total.

La AP-2 y la AP-7 entre Tarragona y la Junquera serán también gratuitas en 2021

Además, según el rotativo, crea un precedente para las autopistas que vencen en 2021 (AP-2 entre Zaragoza y el Mediterráneo y los tramos de la AP-7 Tarragona-La Jonquera y Montmeló-El Papiol, con 479 kilómetros en su conjunto).

Sobre las autopistas quebradas, ha destacado que la información que le han trasladado «no es muy coincidente en términos de los ingresos que podría reportar esa relicitación, ni tampoco en los costes que tiene que asumir el Estado tanto por RPA (responsabilidad patrimonial del Estado) como por las expropiaciones o por algún otro coste pendiente de asumir».

«Tenemos que saber exactamente de cuánto estamos hablando y de la afectación al propio déficit del Estado», ha recalcado Ábalos, que ha destacado además de que le han advertido de que «las concesionarias que tenían esas autopistas van a provocar conflictos judiciales».