El Pleno del CSN revisará mañana las exigencias que demandó a Garoña

Madrid, 2 feb.- El Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear previsiblemente estudiará mañana distintos aspectos relacionados con la planta nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), entre ellos la revisión de las especificaciones técnicas exigidas a su propietario (Nuclenor) para poder volver a operar, según fuentes del CSN.

El pasado 20 de enero, la reunión plenaria del organismo regulador decidió posponer los siete puntos previstos sobre esta central nuclear -la más antigua y pequeña de España- y el futuro Almacén Temporal Centralizado de residuos de alta actividad (ATC), proyectado en Villar de Cañas (Cuenca).

El siguiente Pleno semanal del 26 de enero no se celebró por cuestiones «ordinarias».

Hoy, la mayoría de grupos parlamentarios han hecho un llamamiento al Consejo de Seguridad Nuclear para que no emita informes sobre Garoña mientras haya un Gobierno en funciones y ha reiterado su oposición a la reanudación de la actividad de la planta, paralizada desde 2012 por decisión de su propietario (Nuclenor, participada al 50 % por Iberdrola y Endesa).

Compromís, EH Bildu, ERC, PSOE, IU y Podemos -PNV y Democracia y Libertad han excusado su presencia por temas de agenda- se han reunido hoy para buscar «herramientas» parlamentarias que frenen esa reapertura durante un encuentro al que han asistido Greenpeace y Ecologistas en Acción.

El informe del CSN tiene carácter preceptivo y vinculante. Si es negativo obligaría al cierre de la planta y, si es positivo, dejaría la decisión última en manos de Industria y el Consejo de Ministros.

Además de la revisión de las especificaciones técnicas de funcionamiento mejoradas que pidió el CSN a Nuclenor, el Pleno tiene previsto abordar la modificación de diseño de algunos sistemas eléctricos, del aislamiento de la estructura de contención primaria y de equipos de seguridad frente a la caída de la cubierta del edificio de turbina tras un incendio.

También analizará la ampliación de las condiciones de utilización de un edificio de almacenamiento y una propuesta de cambio de vocal en el tribunal de licencias para Santa María de Garoña.

Sobre el almacén temporal centralizado de residuos radiactivos, el Pleno debatirá la aplicación de la directiva Euratom.

El 30 de julio de 2014, el Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear aprobó una instrucción técnica con nuevos requisitos para volver a estudiar la petición de renovación de licencia de Garoña y su consiguiente entrada en funcionamiento, entre ellos una completa revisión de la vasija de su reactor.

En concreto, se le exigía verificar el estado funcional y la integridad estructural de la vasija del reactor y de sus componentes para descartar defectos como el de la central belga de Döel (en la que se hallaron miles de pequeñas fisuras en el acero de su vasija y cuyo fabricante es el mismo que el de la central burgalesa).

Además debía aplicar un programa de inspección y seguimiento de las penetraciones del fondo de la vasija del reactor, donde se sitúan los tubos-guía de los mecanismos de inserción de las barras de control, y comprobar el estado de los componentes internos de la vasija.

El 27 de mayo de 2014, Nuclenor presentó a Industria su solicitud de renovación para funcionar hasta el año 2031.

Tanto partidos como grupos ecologistas han recordado hoy que es la primera vez en la historia del país en la que se daría luz verde a una renovación a una nuclear por un periodo de 17 años, en lugar de los habituales 10 años. EFE