Las discusiones en Podemos salpican ya a IU e Iglesias quiere a Errejón en Madrid
Pese a las llamadas a dejar de hablar de sí mismos, Podemos no es capaz de salir de la discusión interna en el ecuador de su campaña para Vistalegre II, avivada ahora por el reconocimiento de Pablo Iglesias de que vería «sensato» lanzar a Íñigo Errejón como candidato en Madrid.
Sus diferencias salpican ya a sus estrategias en las redes sociales, que unos y otros usan para confrontar con el contrario, y que ha metido en la polémica también a Izquierda Unida a cuenta de una campaña del equipo de Errejón, que dice en Twitter: «Ni PSOE ni IU, recupera el morado».
Esa frase ha provocado las suspicacias en algunos miembros de la formación de Alberto Garzón, como Carlos Sánchez Mato, responsable de Políticas Económicas en IU federal, que ha replicado a Podemos que «no hace falta» ofender a Izquierda Unida para competir en su proceso congresual. «Sólo pedimos respeto», ha añadido.
La campaña de los ‘errejonistas’ ha sido también criticada por el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero, quien ha lamentado en la misma red social los insultos a IU y «la apropiación del trabajo común en el Ayuntamiento de Madrid». «Dañan la unidad», sentenciaba.
El entorno de Iglesias, muy criticado
Monedero, que participa en multitud de actos de la campaña diseñada por el equipo de Iglesias de cara a Vistalegre II, ha apelado también a hablar del proyecto, de las ideas y no de los insultos. No obstante, parece difícil abstraerse de algunas de las críticas que en las últimas horas ha recibido el «entorno» de Iglesias.
Primero fue uno de los fundadores del partido morado, Luis Alegre, quien calificó de «camarilla» que quiere «parasitar» al líder a algunos de los miembros del equipo de Pablo Iglesias, citando a Irene Montero, Rafael Mayoral y Juanma del Olmo.
Se ha sumado a estas palabras el profesor de Filosofía en la Universidad Complutense, Carlos Fernández Liria, muy vinculado a Podemos desde sus inicios.
En un artículo en Cuarto Poder titulado «Abrazos sin mentiras», Fernández Liria señala que en el «clima de terror» de los últimos meses sólo Alegre ha roto el silencio para denunciar que hay «una pandilla de burócratas intransigentes» que «han secuestrado la Secretaría General, decidiendo emprender una guerra de exterminio contra el errejonismo».
Denuncia que personas del equipo de Iglesias (cita a Mayoral, Montero, Del Olmo, Fran Casamayor y Marco Candela) decidieron que «Podemos se podía arreglar en un pis pas, por los mismos procedimientos en que antaño arreglaban las cosas en las Juventudes Comunistas».
«Un disparate sin igual, pero al que se añadió el dislate de que todo el que no estuviera de acuerdo en participar en esa guerra fuera inmediatamente calificado de ‘errejonista’. Al final, han acabado siendo ‘errejonistas’ casi todos los que construyeron Podemos».
Palabras que dibujan un panorama que no conduce a pensar en una fácil reconciliación de los dos principales sectores del partido sin que haya consecuencias.
Iglesias quería a Errejón en Madrid
El secretario general de Podemos ha reconocido en Antena 3 que vería «sensato» que su número dos se presentara como candidato al Ayuntamiento o la Comunidad de Madrid, que cree que eso hubiera «facilitado muchas cosas» y que han hablado de ello «muchas veces», aunque Errejón lo ha rechazado.
En la candidatura «errejonista» tampoco ha sido bien recibida esa explicación, y la portavoz en el Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, ha lamentado la «falta de respeto» a la autonomía de las candidaturas municipalistas que, ha dicho, «no están a merced de ningún dedo de ninguno de ellos».
Frente a las tensiones internas, Iglesias ha vuelto a llamar a la responsabilidad y a dejar de hablar de los problemas de Podemos.
«Allá cada uno, pero yo prefiero seguir hablando de los problemas de la gente que sufre», ha indicado tras confiar en que Podemos salga «más fuerte» de Vistalegre, pese a que admite que el riesgo de «autodestruirse» siempre existe en política.