El Reino Unido estudia cobrar una tasa por contratar a extranjeros
El Gobierno británico estudia cobrar a las empresas una tasa de 1.000 libras (1.300 euros) por cada trabajador cualificado que contraten en países externos a la Unión Europea (UE), una recomendación que hizo pública hoy el Comité Consultivo para la Inmigración (MAC, en inglés).
El organismo público instó además al Ejecutivo a aumentar el salario mínimo que permite a un trabajador no comunitario obtener un visado para entrar al Reino Unido, de las actuales 20.800 libras anuales (27.000 euros) a 30.000 libras (39.000 euros).
Según el comité, dependiente del Ministerio de Interior y que asesora al Gobierno en materia de inmigración, la tasa propuesta permitirían recaudar 250 millones de libras al año (325 millones de euros) que se podrían destinar a fomentar la contratación de trabajadores británicos.
«Elevar el coste de la contratación de inmigrantes cualificados y la introducción de una tasa debería conducir a una mayor inversión en trabajadores británicos y a reducir el uso de mano de obra inmigrante», dijo en un comunicado el presidente del comité, David Metcalf.
El MAC insta además al Gobierno a endurecer las normas que permiten a las compañías multinacionales obtener visados para los trabajadores que son trasladados al Reino Unido.
El documento publicado hoy revela además que las personas contratadas en países no comunitarios para trabajar en el Reino Unido cobran menos que sus colegas británicos.
Los médicos y enfermeras que recibieron un visado para trabajar en las islas británicas cobran unas 6.000 libras menos al año (7.800 millones de euros), mientras que los profesores en esa situación perciben 2.000 libras menos (2.600 euros).