El youtuber Reset se enfrenta a un delito de prisión por humillar a un mendigo
En los últimos meses dos bromas han salido de Youtube a los medios. La última realizada por «Reset» podría acabar con un delito de odio con agravante.
El joven de 19 años, apodado en Youtube como Reset, podría enfrentarse a penas de 1 a 3 años de prisión y una multa de seis a doce meses, según estipula el Código Penal. Y es que, el artículo 510.2 del Código Penal estipula esta sanción si se demuestra la «modalidad de lesión de la dignidad de la personas mediante acciones que entrañen humillación, menosprecio o descrédito», con el agravante de que fue después subido a Youtube, donde tuvo más de dos millones de visitas antes de ser borrado.
Poco después, Reset se disculpaba por su acción, pero no por el hecho de haber sentido un sentimiento de culpa, sino para responder a otros dos youtubers muy conocidos en España, como «Auronplay» y «Jordiwild», que criticaron duramente la acción del primero. El vídeo fue borrado, pero otros usuarios lo han subido de nuevo a la red.
El caso ha llegado a manos del Ayuntamiento de Barcelona, dirigido por Ada Colau, y la Guardia Urbana ya ha iniciado una investigación penal contra ReSet. De momento, se enfrentaría a un delito de trato degradante y de odio con agravante.
El «cara anchoa» que le puede salir caro a «GranBomba»
La otra broma fue la del youtuber «GranBomba», quien fue denunciado por un trabajador tras ser insultado. El trabajador le golpeó primero arreándole una bofetada, pero GranBomba continuó con sus insultos en un vídeo que después borró de la red.
“Porque sí. Me da la gana denunciar a este individuo, que yo no tengo culpa de qué esté amargado, o bien que no esté bien trabajando ahí. Yo no tengo la culpa de eso”. “Me he rebajado para decirle que era una broma, incluso después de decirle que era un trabajo para la universidad, que era mentira, pero que era para tranquilizarle”, ha explicado Soler. Soler podría cometer un delito de injurias con publicidad
“Es flipante que haya tenido la mala suerte de encontrarme con este individuo. Tengo muchas ganas de vernos en el juzgado, y ya veréis como no se pone tan chulito cuando esté delante del juez (…)”, continuaba. Asimismo, cree que la sala judicial se reirá cuando el trabajador afirme que la agresión se debió por llamarle “cara anchoa”. “Esto es muy ridículo, que alguien pegue a alguien por decirle cara anchoa”, asegura el joven, quien continúa con los insultos al trabajador: “Desequilibrado mental que trata así a la gente, porque ya habéis visto cual es su personalidad: ‘prepotente’, ‘estúpido‘ y ‘un delincuente‘”.
Esta parte del vídeo le puede salir aún más cara que soltar un tortazo. Y es que, según los abogados consultados por INTERECONOMÍA.COM, Soler podría cometer un delito de “injurias graves con publicidad«, un delito tipificado con una sanción de entre 3 y 400 euros y con una pena 7 a 14 meses, que en caso de querer realizar una oposición a cualquier puesto de funcionario público tendría que pasar tres años para intentarlo, ya que este delito estipula que constará en antecedentes policiales durante un período de tres años.