Sánchez ensalza ahora el legado de ‘un referente socialista’ como Enrique Múgica al que despreció en vida

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lamentado este sábado, en una clara muestra de cinismo, como ya sucedió en el fallecimiento de Alfredo Pérez Rubalcaba, la muerte del ex ministro de Justicia y Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, al que ha definido como «un referente socialista» que ha dejado un valioso legado a España. Enrique Múgica, como otros históricos dirigentes socialistas, despreciaban a Pedro Sánchez y manifestaban en público que no se identificaban con el PSOE que él dirige.

«Un referente socialista, un hombre que dedicó toda su vida a defender la democracia y la libertad», señala el jefe del Ejecutivo en un mensaje en su cuenta de Twitter.

Sánchez añade que su fallecimiento «nos deja una gran tristeza pero también el legado más valioso: un país mejor».

Su reacción se suma a la del PSOE, partido que ha alabado al político vasco, fallecido ayer al os 88 años, como «un gran defensor de la democracia, jurista y político, precursor y una de las personalidades más relevantes del socialismo».

Sin embargo, esa muestra de cinismo del presidente del Goberno no tiene precio. Enrique Múgica, como otros tantos dirigentes históricos del PSOE, no consideran a Pedro Sánchez ni por méritos profesionales ni personales como la persona idónea para dirigir a un partido como el socialista. De hecho, Enrique Múgica se ha ido de este mundo sin perdonar a Sánchez sus devaneos, coaliciones y gestos hacia los proetarras de Bildu, dirigidos por Otegui, condenado por terrorismo de ETA, la banda de criminales que mató a su hermano Fernando en plena calle de San Sebastián en el cobarde acto de un tiro en la nuca en febrero de 1996.

De hecho, en diciembre de 2018, un hijo de Fernando, José María, escribió una carta a Pedro Sánchez en la que le comunicaba su baja del Partido Socialista de Euskadi (PSE-EE) tras la cena de nochebuena de la secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, con el terrorista Otegui, a la que también asistieron el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, y el secretario general de Podemos en Euskadi, Lander Martínez.

En esa carta, José María Múgica criticó, con toda la razón del mundo, el liderazgo de Sánchez en el PSOE y afirmó:  «Escenificar una cena de Nochebuena, nada menos, en la que están la secretaria general socialista y Arnaldo Otegi, me parece una auténtica barbaridad. Cuando se llega a esa barbaridad y se cruzan fronteras que nunca se deberían cruzar, se dice que no en mi nombre, tan sencillo, tan complicado y tan triste como eso, no en mi nombre».