Sanidad plantea pasar a la fase 1 con optimismo prudente y vigilante
La Junta de Castilla y León plantea una desescalada a la fase 1 de todas las provincias el próximo 25 de mayo, remitida al Ministerio del ramo, desde un “optimismo prudente y vigilante” ya que, si hubiera un repunte en estos días, se producirían limitaciones en quiénes son las que avanzan, pero admite que es “inseguro” desde el punto de vista epidemiológica y está abierta hasta el jueves.
En la rueda de prensa telemática para informar de la evolución de la pandemia en Castilla y León, la consejera de Sanidad, Verónica Casado, aseguró que se mantienen los criterios sanitarios y epidemiológicos para avanzar y la unidad de referencia de las zonas básicas de salud, si bien subrayó que la evolución de los datos de la última semana permiten plantear al Ministerio de Sanidad una propuesta “más amplia” y dar un paso más en la desescalada.
Según Casado, la disminución de casos en la Atención Primaria, la reducción de los ingresos, las altas y una menor presión de las UCI, aunque aun están extendidas, permiten un “paso más con cautela”, si bien insistió en la vigilancia zona a zona y provincia a provincia para poder pasar toda la Comunidad.
No obstante, advirtió de que si hubiera algún rebrote, como una transmisión comunitaria, se plantearían limitaciones de esas zonas y no pasaría una provincia completa, además de que habría excepciones en algunas de sus actividades como la concentración de más de diez personas, si bien confió, ante los datos actuales, en que eso no ocurra.
Sin embargo, la consejera admitió que la presentación de esta propuesta, que se envía esta tarde al Ministerio, no la hace sentirse “cómoda del todo” por los días que van a transcurrir hasta que se adopte la decisión, prevista para el próximo jueves en la reunión bilateral, para que el día 25 se encuentren en fase 1 todas las provincias.
En tal sentido, reconoció que “son demasiados días” y se pueden producir cambios en la evolución del COVID-19, aunque afirmó que desde el punto de vista de los criterios sanitarios la situación está controlada, pero si admitió que es “inseguro” a nivel epidemiológico porque “el virus hace un poco lo que le da la gana”.
La consejera recalcó que la propuesta se hace hoy pero con un seguimiento en cada zona básica de salud, dado que un cambio en la situación supondría cambios en la decisión del próximo jueves, a la vez que confió también en la colaboración de los alcaldes y presidentes de diputaciones con los que está conversando para que se cumplan con las medidas y evitar los contagios.
Casado rechazó que el modelo propuesto por zonas básicas de salud, como se ha producido la desescalada de las actuales 62, haya fracasado al plantear ahora el cambio de fase por provincias y defendió que el control de “zonas pequeñas” e ir “paso a paso” les da una mayor seguridad para avanzar.
Por otro lado, manifestó que si se siente ni se ha sentido presionada y sostuvo que todos los miembros de la Junta y su presidente comparten que se trata de una crisis sanitaria y que los criterios para progresar en la desescalada deben ser únicamente los sanitarios y los epidemiológicos. “No ha sido una decisión política, sino técnica”, subrayó.
“No conocen bien a este Gobierno, ni al vicepresidente, ni a mí”, respondió en relación a presiones económicas o políticas en la nueva propuesta, a la vez que recalcó que toda la Junta comparte los criterios y que haber sido “más lentos”, cuando otras comunidades incluso con peores regisros pidieron pasar de fase, les permite “no tener un susto”.
Casado reiteró que evitar muertes e ingresos ha sido la clave en la toma de decisiones y defendió, después de un inicio con criterios más restrictivos, que ahora se avance con “más tranquilidad”, aunque siempre desde el análisis puntual de cada zona y la estrecha colaboración de todos.
“Si no no se haría”, insistió en relación a unos datos “optimistas”, que confió en que se confirmen y todas las provincias estén en fase 1 el próximo lunes. Por último, recalcó que se mantienen los criterios como la tasa de personas con PCR positivo por 10.000 tarjetas sanitarias de cada zona básica de salud en los últimos 7 o 14 días, su control y aislamiento y la realización de los test, aunque también precisó que en el caso de aumento de debe ver si son nuevos, antiguos o están controlados.