Soros y sus vinculaciones con el referéndum ilegal del 1-O

El juez del juzgado de instrucción 13 de Barcelona, Juan Antonio Ramírez, exigió el 16 de septiembre de 2017, diez días antes del referéndum ilegal, bloquear las webs relacionadas con esta convocatoria inconstitucional. Todas lo hicieron, menos una: Parlem.

La mayoría de teleoperadoras, incluidas las tres grandes, siguieron las órdenes del juez ya que iban en contra de la sentencia del Tribunal Constitucional, más cuando algunas de ellas tenían como fin recabar voluntarios para colocar las urnas ilegalmente. En el caso de la operadora Parlem (Parlem Telecom Compendia de Telecomunicacions, S.L.) no solo no bloqueó las webs, sino que anunció que no lo iba a hacer.

Us imformem que els clients de Parlem sou lliures per accedir a qualsevol web des d’internet fix i mòbil

— Parlem (@parlem_telecom) 16 de septiembre de 2017

«Os informamos que los clientes de Parlem son libres de acceder a cualquier web desde Internet fijo o móvil», aseguraba a última hora de la noche del 16 de septiembre a través de Twitter. El escrito alcanzó en pocas horas miles de RT y «Me gusta».

És impossible posar portes al camp. Seguim! #1Oct pic.twitter.com/YJUQpMAtRU

— Carles Puigdemont ? (@KRLS) 16 de septiembre de 2017

El escrito fue también corroborado por el entonces presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a través de la misma red social. «Es imposible poner puertas al campo», aseguraba sobre el cierre de webs y afirmaba: «Desde Parlem pueden seguir conectados!! Estamos ahí».

La operadora no solo había dado la espalda a una resolución judicial, sino que a sus clientes les regaló un 1GB por «el momento histórico» que conllevaría después la huida de miles de empresas, una fractura social sin precedentes, así como una tensión y violencia en las calles.

La operadora catalana, que inició su negocio en 2014, fue financiada por la Generalitat con un millón de euros tan solo cinco meses antes de la celebración del referéndum ilegal, según han asegurado analistas en el informe “Agentes oscuros y hostigamiento en la zona gris”, un estudio cuya finalidad es averiguar la mano de George Soros sobre el referéndum ilegal, según recoge  confilegal.

El informe se basa en fuentes abiertas y constata que “George Soros está directamente relacionado con Masmovil -y por lo tanto Parlem y otras- a través de Gala Capital”. Gala Capital ostenta el 10% del llamado cuarto operador y en su capital han aparecido inversores vips como Rafael del Pino o Koplowitz.

Un think tank financiado por Soros

“El periódico The New York Times ha descrito al Consejo Atlántico, junto con la Brookings Institution y el Center for Strategic and International Studies como ‘think tanks’ que han suscrito “acuerdos” no divulgados con gobiernos extranjeros”, ha asegurado el informe.

Según los analistas, el Atlantic Council es uno de los instrumentos de los que se sirve George Soros, desde “su fundación personal, Open Society Foundations (OSF), para conformar un entramado de relaciones, empresas, fondos de cobertura, ONGs y otras entidades que, gracias a información privilegiada, dinero y contactos” influyen en las opiniones públicas y en los gobiernos. Todo ello con el fin de provocar un cambio.

“En mayo de 2016, un informe de la Associated Press identificó al Atlantic Council como uno de varios ‘think tanks’ que habían recibido una notable financiación del Ploughshares Fund. Este fondo cuenta con la Open Society Foundations y la Open Society Policy Center como dos de sus máximos benefactores con aportaciones, cada uno de ellos, de 100.000 dólares o más“, han afirmado. Este ente cargó contra la Policía y Guardia Civil por su actuación en el 1-O.

Goldman Sachs, a favor del referéndum

“Una postura coincidente con la de una carta publicada el pasado 8 de noviembre de 2017 (en inglés, español y catalán) por Open Democracy”, financiada por Soros. Este ente tiene millones de visitas.

Sin olvidar tampoco al banco de inversiones Goldman Sachs, que en un informe fechado el 23 de agosto de 2017, y del que se hizo eco Vox Pópuli el 8 de septiembre de 2017, afirmaba: “A pesar de la oposición del Gobierno, esperamos que haya una votación el 1 de octubre. Creemos que una mayoría de los que voten en el referéndum apoyará la independencia catalana de España, debido a una participación más baja”.