Standard & Poor’s vuelve a rebajar la nota de la deuda soberana de Brasil
(Actualiza con reacción del Gobierno brasileño)
Sao Paulo, 17 feb.- La agencia de calificación de riesgo Standard & Poor’s volvió a rebajar hoy la nota para el crédito soberano de Brasil de «BB » a «BB», que mantuvo con perspectiva negativa dos meses después de que el país perdiera su grado de inversión.
S&P, que ya redujo en septiembre la puntuación de la deuda de Brasil, volvió a bajar hoy también la nota del crédito a corto plazo de «A-3» a «B», un escalón en el que se considera como especulativo, según informó la agencia.
La calificadora justificó su decisión alegando que el perfil del crédito de Brasil se ha debilitado desde el pasado septiembre, mientras que los desafíos políticos y económicos siguen siendo «considerables».
Por ello, S&P espera «un proceso de ajuste más prolongado con una corrección más lenta de la política fiscal» y pronostica que el país suramericano cerrará 2016 con una contracción económica de alrededor del 3 %, tras acabar 2015 con una retracción del 3,71 %, de acuerdo con los cálculos de los analistas del mercado financiero.
Los mismos economistas, consultados semanalmente por el Banco Central, prevén que el Producto Interior Bruto (PIB) brasileño caiga un 3,33 % este año.
No obstante, S&P proyecta que el país dará un repunte en 2017, cuando cree que crecerá un 1 %.
La agencia apuntó una vez más al enturbiado ambiente político, que mantiene a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, al borde de un juicio político en el Congreso con miras a su destitución, y que, de acuerdo con la firma, complica la aprobación de medidas de ajuste fiscal para reactivar la maltrecha economía nacional.
«Pese a los planes del Gobierno para planificar una reforma estructural, como las pensiones, esperamos que el ambiente político tras el proceso de ‘impeachment’ (juicio político con fiens de destitución) siga limitando la viabilidad de las reformas, independientemente de quien sea presidente».
S&P señaló asimismo a los escándalos de corrupción, que salpican a decenas de políticos, como un ingrediente más que mantiene en jaque la incertidumbre del país.
«Creemos que las actuales investigaciones de corrupción de individuos y compañías de alto escalón, tanto en el sector privado como en el público, y en diferentes partidos políticos, aumentaron la incertidumbre política a corto plazo», afirmó la agencia.
El Gobierno brasileño rechazó este diagnóstico y, en un comunicado oficial divulgado esta misma tarde, afirmó que pese al actual escenario de «contracción económica» el país mantiene su capacidad «de honrar sus compromisos y de cumplir con sus obligaciones contractuales».
El Ejecutivo destacó, además, que la futura adopción de nuevas reglas fiscales «reducirán la incertidumbre, promoverán una mejoría de los niveles de confianza y reducirán los tipos de interés a largo plazo y la volatilidad de los tipos de cambio».
Asimismo, señaló el Gobierno en el comunicado, a pesar del panorama de «incertidumbre política» al que hace referencia S&P en su informe, la agencia «enfatiza la solidez del ajuste externo, lo que contribuirá a una recuperación de la economía más rápido de lo esperado».
Brasil perdió el pasado diciembre el sello que lo caracterizaba como buen pagador y del que gozaba desde 2008 después de que la agencia Fitch, tras S&P, rebajara la nota para la deuda soberana a la categoría de especulativa.
Por el momento, tan solo Moody’s, otra de las tres grandes agencias, mantiene a Brasil su grado e inversión, aunque ya advirtió que también puede revisar hacia abajo la calificación de la deuda del país. EFE