¿Quién está tiñendo de rojo las Bolsas?
Los nervios en los parqués están a flor de piel, y son los grandes fondos soberanos de los países exportadores de petróleo los que más hacen gala del pánico. Y es que el impacto de la caída del precio del petróleo sobre estos fondos está siendo nefasto. Tanto, que no les queda otra que vender renta variable para equilibrar las pérdidas.
Otros fondos importantes que están soltando papel son los que tienen un límite de pérdidas, conocidos como fondos VAR. Las fuertes caídas en bolsa les hacen entrar en importantes pérdidas que, por normativa interna, no están permitidas. La única forma de revertir la situación: vender. Y algo similar les sucede a las grandes aseguradoras que, también por normativa interna, no pueden tener en cartera activos de riesgo y, hoy por hoy, en bolsa, pocos valores no son considerados de riesgo. Albert Enguix, gestor de GVC Gaesco, explica que son fundamentalmente fondos de Arabia Saudí y Noruega. Entiende que «las caídas vienen provocadas por fuertes volúmenes de venta que son originadas por grandes fondos soberanos de países exportadores de petróleo. Vemos que está incrementando el riesgo por una incertidumbre a nivel mundial provocada por una posible desaceleración y por normativa tienen que vender grandes volúmenes de renta variable. Son los que están provocando ahora mismo estás fuertes caídas».
En este contexto, los expertos de GVC Gaesco admiten que estas ventas forzadas iniciales siempre producen un cierto efecto arrastre en los inversores minoritarios, que son los primeros que se asustan cuando los mercados se tiñen de rojo. Sin embargo, el inversor institucional de largo plazo, donde en definitiva se encuentra la gran mayoría del volumen, no está vendiendo, sino todo lo contrario. «Los institucionales lo que están haciendo es recomprar acciones mucho más baratas porque realmente las ven a precios muy atractivos y a largo plazo esperan rentabilidades muy muy altas. Estos no se están asustando. En este tipo de situaciones, los primeros que se asustan son los minoristas, porque tampoco tienen una disciplina financiera férrea. Pero las grandes instituciones lo que están haciendo es comprar acciones de las empresas en las que ya están invertidos», explican desde la firma.
Puede observarse este hecho mediante el escaso volumen negociado con el que se están produciendo estos descensos de principios de año. Los volúmenes negociados son muy moderados si los comparamos con los de los últimos años.