Tsipras, de nacionalizar a privatizar

El líder de Syriza, el partido político griego equivalente al Podemos español ha cambiado radicalmente su discurso desde que gobierna y no sólo en materia de pensiones, sueldos, impuestos, despidos o funcionarios, sino también en dejar en manos de la iniciativa privada sectores claves de la economía griega.

El último de estos ejemplos llevado a cabo por Alesis Tsipras es el importante puerto del Pireo.  Grecia materializó hoy la primera etapa de la cesión por 36 años de la gestora del puerto del Pireo a China con el traspaso de la mayoría de las acciones de la hasta ahora empresa pública OLP a Cosco, firma con sede en Hong Kong.

En un comunicado, la autoridad encargada de gestionar la privatización de las empresas públicas griegas, Taiped, calificó la venta de la empresa gestora del puerto como uno de los «hitos» del programa de privatización heleno.

Cosco se comprometió a adquirir el 67 % de OLP por un total de 368,5 millones de euros en dos fases.

La primera concluyó hoy con la venta del 51 % de las acciones, por valor de 280,5 millones de euros.

En una siguiente etapa, que tendrá lugar en un plazo de cinco años y después de que Cosco haya invertido parte de los 350 millones de euros en el puerto a los que se ha comprometido, la empresa estatal china abonará el segundo tramo de 88 millones de euros y adquirirá el 16 % de las acciones pendiente.

El valor total del acuerdo asciende a unos 1.500 millones de euros, ya que además de la adquisición del 67 % de las acciones de la OLP y las citadas inversiones obligatorias, el contrato incluye un abono al Estado griego por un total 410 millones de euros.

En 2009 Cosco adquirió una de las dos terminales de carga y después construyó una tercera por lo que, al conseguir ahora el 67 % del puerto, el gigante chino del transporte marítimo controlará la mayor parte de este puerto, el mayor centro logístico para la distribución de mercancías en Grecia y en el Mediterráneo Oriental.

En total, el periodo de cumplimiento del contrato abarca una década, durante la que habrá desembolsado 1.500 millones de euros por la empresa gestora.

En este monto están incluidas la venta en sí, las inversiones, así como 410 millones de euros al Estado griego.