UGT, sin poner ni arriesgar un euro, quiere compartir consejo con los fondos de inversión en Celsa

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha urgido este viernes a «encontrar socios industriales con capital español» para asegurar el futuro de la siderúrgica Celsa, y ha pedido también que los representantes de los trabajadores, entre ellos UGT, que es el primer sindicato en el grupo, estén en el consejo de administración, eso sí, sin poner un euro ni arriesgar nada de inversión, como lo hacen los fondos de inversión que se han hecho con el control de la siderúrgica tras una sentencia judicial.

Álvarez se ha referido a la situación de Celsa tras mantener una reunión en Barcelona con la sección sindical de la UGT en este grupo siderúrgico.

A principios de septiembre, una sentencia del juzgado mercantil 2 de Barcelona dio vía libre a un grupo de fondos de inversión extranjeros para sustituir a la familia Rubiralta como propietarios de la siderúrgica, pero ahora el Gobierno debe decidir si autoriza o no la toma de control por parte de los fondos en esta empresa estratégica y qué condiciones en caso de dar su visto bueno.

UGT pide al Gobierno que no eternice la decisión sobre los fondos de inversión en Cesa, pese a que ya hay una sentencia judicial en firme

En este contexto, Álvarez ha urgido al Gobierno a adoptar una decisión sin mucha demora, porque «este no es un proceso que se pueda eternizar», ha argumentado.

Álvarez ha opinado que la situación actual es «un poco absurda», puesto que «todo está en interinidad y los responsables del trabajo diario de la empresa lo hacen con algunas limitaciones propias de la sentencia» que dio la propiedad de la compañía a los fondos acreedores, si bien todavía no disponen del control efectivo de la siderúrgica.

Ha subrayado que la sentencia de Celsa «ocupa y preocupa» a UGT, que reclama a las administraciones que garanticen dos cuestiones «fundamentales»: los puestos de trabajo y los centros de trabajo en el grupo siderúgico.

Erre que erre con las movilizaciones

«El Gobierno tiene la posibilidad de retener e incluso impedir que este proceso se lleve adelante (…) Vamos a estar para conseguir esos objetivos y en este camino no descartamos ni movilizaciones ni ningún tipo de acto que nos ayude a conseguir los objetivos que tenemos», ha dicho el dirigente sindical, que ha pedido evitar que la empresa «caiga en manos de quienes solo invierten para especular o tener rendimientos económicos».

El escenario deseable por parte de UGT sería que un socio industrial español «entrara de manera mayoritaria» en Celsa o «con perspectiva de tener mayoría» más adelante, aunque Álvarez ha comentado que, lo importante más allá de la composición accionarial a corto plazo, es que haya «un consejo independiente».

Y en esta línea ha reclamado que los representantes de los trabajadores «se incorporen al consejo de Celsa» – que los fondos ya han dicho que estará presidido por Rafael Villaseca, exconsejero de Naturgy- y que también los sindicatos participen de las conversaciones que están llevando a cabo entre el Gobierno y los fondos sobre el futuro de Celsa.

«Estamos esperando a que el Gobierno cite a las federaciones de industria de los sindicatos a participar en esta negociación», ha dicho.

Álvarez pide mayor implicación de la Generalitat en el caso Celsa

Álvarez, que antes de liderar el sindicato a nivel estatal encabezó la UGT catalana durante muchos años, ha aprovechado su visita a Barcelona para instar a la Generalitat a «entrar a trabajar para encontrar una solución que permita asegurar el futuro y los puestos de trabajo de Celsa».

El sindicalista socialista, alineado con el gobierno de PSOE-Unidas Podemos, ha asegurado que le gustaría que la crisis en torno a Celsa formara parte del «día a día» del gobierno catalán y que también una «sesión solemne del Parlamento catalán» se pudiera «ocupar de Celsa», ha dicho en relación al debate de política general que ha celebrado esta semana la cámara autonómica.

«Exigimos al Govern que entre en esta materia. El otro día se lo exigía al gobierno cántabro, ya que el grupo Celsa supone el 30 % del PIB industrial de Cantabria, y hoy se lo exigimos al presidente Pere Aragonès. No es una cuestión menor. Nos estamos jugando miles de puestos de trabajo», ha dicho Álvarez.

«Queremos que las comunidades sean también parte de esta negociación», ha reivindicado el dirigente sindical, que ha recordado que la sede del grupo está en Castellbisbal (Barcelona).