Venezuela despide con banderas de ETA en el funeral a un terrorista vasco
Miguel Ángel Aldana Barrena, el etarra que asesinó a 18 personas en unos 30 atentados de los comandos Kioto y Bizkaia y por los que nunca cumplió condena, murió el pasado 3 de abril en Caracas, donde se refugió en 1990. Chávez nunca lo extraditó, como pedía la Audiencia Nacional argumnetando que no lograba encontrarle.
Según publica Leyre Iglesias en el diario El Mundo, el cuerpo fue velado con una gran pancarta de ETA sobre el féretro abierto.
Asimismo, a esta ornamenta la acompañó un cuadro que tenía la serpiente que significa la astucia, el sigilo, enrollada a un hacha, que es la fuerza, y el lema: “Bietan jarrai”, (adelante con las dos: con la vía política y con la militar).
Antes de llegar a Venezuela, informa El Mundo, estuvo desterrado en la pequeña isla de Yeu y en 1985 Francia lo deportó a Quito. Su siguiente destino fue Santo Domingo y el siguiente, Panamá, donde el nuncio vaticano Antonio Laboa lo refugió junto a otros etarras (y al general Noriega) ante la invasión norteamericana de diciembre de 1989. En el avión personal del entonces presidente de Venezuela, el socialdemócrata Carlos Andrés Pérez, y a petición del Gobierno de Felipe González, Angelín, que así es como lo llamaban, voló a Caracas.
Funeral en Venezuela con el hacha y la serpiente de ETA. Aquí sería delito. En @elmundoes https://t.co/tU5b0KVjLn pic.twitter.com/hN2AqWXnIv
— El Español (@elespanolcom) 15 de abril de 2016