España, fábrica de jóvenes parados

Conocíamos esta semana que España lidera el paro juvenil en la UE con una tasa de desempleo que alcanza el 43,9% a cierre del mes de agosto, por delante de países como Grecia o Italia, y muy lejos de Alemania que es el país europeo con menos jóvenes desempleados.

Esto está pasando en un país con una alta tasa de abandono escolar, un exceso de unversitarios y una escasa apuesta por la formación profesional. A ello hay que sumar que cada vez se tarda más tiempo desde que se sale de la Universidad hasta que se encuentra el primer trabajo.

Una situación agravada por la pandemia que amenaza el futuro de una generación que tendrá difícil tener derecho a una pensión digna si no empiezan a trabajar antes de los 30 años. También será complicado su acceso a una vivienda. Sirva como ejemplo el Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España que también esta misma semana apuntaba que los jóvenes madrileños tendrían que destinar el 105% de su salario para poder pagar un alquiler medio.

Por si fuera poco el Gobierno aprobaba esta semana el decreto que permitirá aprobar el Bachillerato con varios suspensos. Una rebaja de nivel que influirá negativamente en la formación de muchos jóvenes y hará más difícil todavía que puedan encontrar un puesto de trabajo. O ponemos remedio o estamos abocados a una nueva generación de «ninis». Jóvenes que no van a tener ni preparación, ni empleo, ni expectativas de futuro.