La industria de la gestión de activos, ¡plena revolución!

Hace unos días tuve la oportunidad de asistir a una mesa redonda en la que cuatro prestigiosas figuras de la industria de la gestión de activos intentaron dibujar el escenario al que se enfrenta la industria de la gestión de activos en España. Eran Santiago Satrústegui  presidente de EFPA y de Abante Asesores,  José Miguel Maté consejero delegado de Tressis, Cipriano Rodríguez Arias, socio en Orienta Capital y Enrique Fernández Albarricín jefe de regulación financiera en EY.  Y la mesa se encuadraba en una jornada para asesores financieros organizada por Aseafi.

Cuatro pesos pesados que marcaron las claves de éste y los próximos años: el sector se enfrenta a un estrechamiento importante de márgenes, está claro que las comisiones bajarán por una cada vez mayor competencia y la fuerte irrupción de la tecnología;  esperan también un mayor auge de la gestión pasiva, totalmente complementaria a la activa y que  aquí en España tiene amplio margen de recorrido. Ya estamos viendo cómo cada vez más gestoras internacionales presentan estrategias de gestión pasiva.  A las ya clásicas Vanguard, Lyxor, DWS, Blackrock o Amundi… otros jugadores comienzan a ver aquí una oportunidad para ampliar gama y captar patrimonio y clientes.

Además el sector tiene claro que hay vida más allá de la banca privada: las bancas personales son el caladero dónde ya están comenzando a salir a pescar las gestoras. Gestoras que buscan, además, volúmenes más grandes, necesitan ganar tamaño. Este año 2020 ya hemos asistido a la primera gran operación con la compra de Sabadell AM por parte de Amundi.

El año ha comenzado a andar y la industria financiera no para. ¡Es apasionante el momento que vivimos y más apasionante será: con más trasparencia, mejor servicio al cliente, mayor profesionalización de asesores y agentes, mejores productos, comisiones explícitas y confiemos también en un aumento de la cultura financiera! A por 2020.