La factura del virus hunde a la economía del Reino Unido

La errática estrategia del gobierno de Boris Johnson para controlar la pandemia del coronavirus le ha pasado una dolorosa factura a la economía británica.

El PIB de Reino Unido se ha hundido un 20,4% en abril. Sumado a la caída del 5,8% de marzo, la contracción se traduce en la eliminación de 18 años de expansión en tan solo dos meses. Es probable que haya un rebote a medida que las empresas comienzan a reabrir, pero la fuerte recesión podría presionar al ejecutivo de Johnson y al Banco de Inglaterra para inyectar más estímulos.

El varapalo económico completa una semana difícil para el primer ministro británico, que se enfrenta a las crecientes críticas de los políticos y asesores científicos sobre su gestión desde el comienzo de la crisis sanitaria. Además de registrar el mayor número de muertos en Europa por Covid-19 (más de 41.300), el Reino Unido también ha pagado un alto precio económico.

La OCDE dice que el país podría ver una de las recesiones más profundas del mundo desarrollado en 2020, con una caída de la producción de más del 11%, la peor en más de 300 años. Y todo podría empeorar aún más si Londres no consigue alcanzar un acuerdo con la Unión Europea sobre su futura relación comercial tras el Brexit.