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El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, avaló hoy su presencia en el Senado para defender “los intereses de los vallisoletanos” en la Cámara Alta, algo en que se ocupa en “cuerpo y en alma por parte de este alcalde”. Así lo señaló el regidor en un pleno extraordinario del Ayuntamiento vallisoletano convocado a instancias del PSOE para debatir su dedicación a la alcaldía y la ciudad y en el que el portavoz socialista le reprocho las “faltas de respeto hacia los ciudadanos” or su carácter de “medio senador”.
Carnero tiró de Constitución, el “mejor campo de juego que tenemos todos y cada uno de los españoles” para defender su presencia en la Cámara Alta, de la que destacó su carácter territorial. La Carta Magna, explicó, recoge el régimen de “compatibilidades y de incompatibilidades” de diputados, senadores y alcaldes, por lo que es «lógico y plausible, aunque no exclusivo, que estén presentes los representantes de las comunidades autónomas y de las entidades locales”. De hecho, explicó, otros compañeros de entidades locales ejercen su responsabilidad al “defender los intereses de su municipio y del resto de su provincia”. “Es de sentido común”, apostilló para citar a continuación a Marco Aurelio, la “pura simplicidad”.
Pedro Herrero cargó con dureza contra Carnero de quien dijo que es el “peor alcalde de la ciudad”, porque “ni está ni se le espera” y consideró que su condición de senador “sólo ofrece beneficios para su persona”.“Usted es un privilegiado y se ha montado un auténtico chollo, que es el de siempre, porque en su trayectoria solo pertenece a esos políticos de mesa puesta y no sabe lo que es trabajar desde abajo”, señaló Herrero, al mismo tiempo que lamentó que tenga “hecha un desastre la ciudad y no cumpla sus compromisos”.
Agendas públicas
El portavoz socialista tiró de la agenda pública del alcalde y le reprochó haber disfrutado de “83 días libres de 365, con 103 mañanas y 227 tardes libres”. “Cuando dice que es un desgraciado, se burla de los trabajadores y vecinos de Valladolid”, porque esta ciudad “requiere tener un alcalde en dedicación exclusiva”, al mismo tiempo que criticó que todos los meses “cobre de los dos lugares”, lo que se traduce en un “beneficio personal y un perjuicio para la ciudad”, recalcó Herrero.
Esta aseveración fue respondida también con dureza por la portavoz del Grupo Popular, Blanca Jimenez, quien acusó a Herrero de “mentir burdamente” ya que el alcalde renunció a recibir las retribuciones que le corresponden en el Ayuntamiento y optó por aquellas como senador, algo que hizo “su admirado Puente cuando fue elegido diputado” y que supondrá un ahorro a las arcas públicas de 490.000 euros durante este mandato. La portavoz popular se refirió también a la agenda pública y al salario del concejal socialista y le reprochó trabajar únicamente ocho días en febrero, nueve en marzo, doce en abril y 13 en mayo, es decir, un coste de “800 euros al día a Valladolid” reprochó.
Herrero criticó que la presencia del alcalde en el Senado se basa en “excusas”, las cuales se cimientan en “cumplir la misión para salvarnos de la integración ferroviaria”, además de la de “controlar al Gobierno y a Óscar Puente” y la tercera, como “comodín del público”, que no es otra que para “defender España”.
La réplica de Blanca Jiménez también fue en el tono duro en que se desarrolló la sesión y tiró de ironía para “darle las gracias al señor Herrero porque hoy se demuestra lo que llevamos sufriendo desde hace un año, porque el PSOE miente sin pudor a los ciudadanos y ha llegado el momento para saberlo”, significó la portavoz ‘popular’, Blanca Jiménez, quien cargó contra el “estilo macarra” de Herrero, de quien dijo que “no supera el trauma” de no ganar las elecciones, ya que “nunca será alcalde de Valladolid”.
Jiménez dijo de Herrero que “está en caída libre y ha decidido morir matando”, por lo que “acabará muerto con su retahíla de mentiras”. Asimismo, dejó claro que la condición de alcalde y senador “es legal y perfectamente compatible” y enfatizó el “aval” que a su juicio han dado los ciudadanos a esta decisión en forma de votos en las últimas elecciones. “Menos mal que Carnero está en el Senado para que los ciudadanos no pasen vergüenza por lo que ocurre en España”, dijo.
“Extrema paciencia”
Desde Vox, su portavoz y primer teniente de alcalde Irene Carvajal defendió la gestión municipal y atacó a la oposición: “Algo caracteriza al Valladolid y es que es el mandato de la libertad, pese al temor que quieren infundir desde Twitter”. Asuma, señor Herrero, dijo, que el “bloque social comunista fue expulsado del Gobierno municipal en el ejercicio democrático de los vallisoletanos en las urnas”. Además, reprochó al portavoz del PSOE que “no es un buen ejemplo de agendas vacías al ver su trayectoria profesional y vital” y destacó que lo define su “incoherencia”, ya que “no ha superado el duelo de las pasadas elecciones municipales, donde Valladolid dijo no a la izquierda y si a una coalición de derecha con extrema paciencia”. Es una ciudad que “no le votó”, pero que está ahí “por descarte tras la salida de Puente”.
Asimismo, lamentó que las políticas del PSOE “nos dividen en ciudades, regiones y vallisoletanos de primera y de segunda”, por lo que “existen motivos más que de sobra para que Carnero haga valer en el Senado lo que Puente nos niega en el Ministerio”.
“Sin patear barrios”
Por último, Roció Anguita, de Valladolid Toma la Palabra, acusó a Jesús Julio Carnero de ser un alcalde que “no patea barrios ni calles para ver cómo están las cosas”, dado que “llega y se va en coche y no deja que le interpelen los vecinos”. “Echa balones fuera porque no conoce la ciudad ni sus temas, ya que su domicilio no está en Valladolid y no sabe cómo se va de un barrio a otro”.
Y es que, tener una dedicación compartida con el Senado “no le permite cumplir con las funciones asignadas como alcalde”, por lo que preguntó cuantas gestiones hizo en Madrid par atraer más fondos, proyectos e inversiones y algo que redunde en la mejora de la ciudad, porque “creemos que pocos”.
