A&G ficha a Carlos Ortiz para reforzar su equipo de banca privada de Bilbao
La gestora de fondos de inversión A&G ha decidido reforzar su presencia en el País Vasco con la incorporación de Carlos Ortiz como nuevo banquero privado en su oficina de Bilbao.
Este nuevo fichaje, sumado a la incorporación de Ander Arcaraz en julio, eleva a cinco el número de banqueros privados en Bilbao, desde que la oficina abrió en 2021 en la calle Gran Vía 49. El equipo también está formado por Ainhoa González, Ana Bárcena y Unai Acha.
Carlos Ortiz llega a A&G procedente de Acacia Inversión, donde desempeñaba funciones de gestor de patrimonios. Previamente, fue director en Caja Rural de Navarra desde 2009 y trabajó en el área legal de PwC durante dos años. Es licenciado en Derecho Económico por la Universidad de Deusto y posee un MBA por la Universidad Politécnica de Cataluña, además de las certificaciones EFA y ESG Advisor.
Esta es la segunda incorporación reciente de A&G tras la llegada de Francisco Lomba, quien asumió el cargo de responsable de distribución de fondos líquidos.
Sobre la A&G
Juan Espel, director general comercial de A&G, expresó: “Estamos muy contentos de contar con un profesional del calibre de Carlos en una región tan importante para nosotros como el País Vasco. En A&G nos comprometemos a brindar el mejor servicio a nuestros clientes, y por ello buscamos continuamente profesionales que compartan nuestra visión de excelencia. Queremos seguir creciendo con expertos reputados que fortalezcan nuestra estrategia de cercanía y asesoramiento personalizado».
Por su parte, A&G se ha construido con una misión clara: convertirse en la mejor entidad de Banca Privada en España. Cada aspecto de la compañía está alineado con este objetivo, desde la propuesta de valor ofrecida a sus clientes hasta la relación con los accionistas y el cumplimiento de las licencias regulatorias. Su enfoque se basa en la búsqueda de la excelencia y la dedicación exclusiva.
Fundada en 1987 por un grupo de familias y empresarios españoles, A&G nació con el propósito de ofrecer un servicio independiente que atendiera sus propios patrimonios bajo los más altos estándares de calidad. Se podría decir que en ese momento surgió el primer Multi-Family Office de España.