La cultura empresarial española: no mostrar cuentas, sin ahorro interno y pedir dinero al banco

El presidente de Renta 4, del Instituto Español de Analistas Financieros (IEAF) y  de la Fundación de Estudios Financieros (FEF), Juan Carlos Ureta, ha criticado hoy que la banca española eluda la financiación de la innovación y el emprendimiento y que no contribuya al cambio de la estructura y del tamaño de las pymes.

Según Ureta, la mayoría de las empresas en España, por la cultura imperante, son poco propensas a demandar capital, a acudir a terceros, a enseñar sus cuentas, por lo que prefieren pedir financiación a los bancos y solo requieren dinero de los mercados con urgencia y para resolver problemas graves. En su intervención, el presidente de IEAF ha resaltado la paradoja de la financiación en España, consistente en la insuficiencia del ahorro interno y la falta de capital de las empresas, lo que no impide que consigan recursos externos con poca dificultad, excepto en casos concretos, como sucedió en 2012.

En este sentido, ha indicado que los vehículos de inversión colectiva solo suponen en España el 35% del PIB -los fondos de pensiones el 10%-, frente al 80% en los países de la OCDE, lo que dificulta el suministro de capital a las empresas. Por ello, para que la desaparición de la confianza exterior no perjudique al tejido productivo, Ureta demandó un «cambio cultural» como el emprendido por Bolsas y Mercados Españoles con los mercados alternativos bursátil y de renta fija y con la iniciativa de la unión de los mercados de capitales promovido por la Comisión Europea para disminuir la dependencia de la financiación bancaria.

En la inauguración de la jornada «Financiación Empresarial en España: estrategias de futuro», Ureta ha analizado el entramado de la financiación societaria en España. Así, ha destacado que la banca cubre bien los flujos de circulante de la compañías, así como los recursos necesarios para acometer su capacidad productiva y expansión internacional, pero rehuye los proyectos innovadores, campo del que se ocupan los mercados de capitales.

El también presidente del banco Renta 4 ha comentado la debilidad de la base de financiación empresarial en España y ha resaltado las diferencias existentes entre las grandes compañías del IBEX y el resto del tejido productivo, integrado en más de un 90 por ciento por pymes.

Así, ha señalado «la vulnerabilidad del sistema empresarial» nacional por su dependencia de la financiación bancaria, que representa el 80 por ciento del total en España, igual porcentaje de recursos e inversión que canalizan otros actores financieros en los Estados Unidos y que, en su opinión, han permitido a ese país salir antes de la reciente crisis.