Abertis: dividendo de 600 millones para ACS y Mundys

Los primeros nueve meses de Abertis del año 2023 ha sido brillantes para la concesionaria participada por el Grupo ACS, la propia ACS y Hochtief, y la italiana Mundys, con un beneficio de 618 millones de euros, el 22% más que en los mismos meses de 2022. Ese beneficio de los nueve primeros meses adelanta un gran ejercicio que se plasmará en un dividendo de 600 millones de euros que se abonará en 2024.

Esa positiva evolución de la concesionaria de autopista se traduce en una alta rentabilidad para sus dos accionistas, el Grupo ACS y la italiana Mundys, al antigua Atlantia, propiedad de la familia Benetton y del fondo Blackstone.

El presidente y consejero delegado de Abertis, Juan Santamaría, ha tenido un reciente encuentro con los analistas donde ha transmitido que el consejo de administración de la concesionaría continuará con su política de retribución al accionista aprobada en la junta general de accionistas de 2021.

Esa junta llegó tras la decisión en 2020 de rebajar desde 875 millones de euros el dividendo por la fuerte caída del tráfico en las autopistas debido a las duras medidas de confinamiento que decretaron muchos gobiernos, entre ellos el español, prohibiendo los desplazamientos y el tráfico rodado.

Abertis, una compañía en alza

Y todo parece indicar que la política de remuneración al accionista seguirá al alza. En primer lugar, Abertis goza de una estabilidad accionarial equilibrada entre ACS y Mundys, con el compromiso de sus socios de apoyar financieramente su crecimiento.

Entre los últimos proyectos que garantizan la rentabilidad de Abertis en un futuro está la adjudicación de un proyecto para modernizar cuatro autopistas de Puerto Rico, siendo esta la mayor inversión de la compañía en 15 años.

«La inversión que Abertis se está comprometiendo en Puerto Rico es la mayor inversión que se ha hecho en los últimos 15 años y es la segunda más importante que hemos hecho en la historia de la compañía», afirmó en una conferencia de prensa en San Juan el consejero delegado de la empresa española Abertis, José Aljaro, el pasado 18 de octubre la anunciar el proyecto.

Esta concesión contempla un pago inicial de 2.850 millones de dólares -2.691 millones de euros, al cambio actual- a la Autoridad de Carreteras y Transportación de Puerto Rico (ACT), que permitirá a esta entidad estatal cubrir el pago de su deuda y contar con capital para gestionar otras vías, y una inversión posterior de capital privado de 2.370 millones.

Se trata de un acuerdo de Alianza Público-Privada (APP) entre la ACT y Abertis por un término de 40 años para la mejora, financiamiento, reparación, operación y mantenimiento de las carreteras de peaje PR-20, PR-52, PR-53 y PR-66. Se crearán más de 1.100 empleos directos e indirectos.

Compromiso con Puerto Rico

«Nuestro compromiso con Puerto Rico va más allá de la visión que tenemos como un puro y simple negocio. Apostamos también por consolidar al país como un referente en modernidad e innovación en la gestión de autopistas gracias a nuevas tecnologías que estamos implantando en nuestras vías», subrayó Aljaro.

Para financiar la operación, así como la adquisición de la SH-288 en Houston (Texas, Estados Unidos) por 1.532 millones de dólares (1.446 millones de euros), Abertis, controlada por ACS y Mundys, llevará a cabo en las próximas semanas una ampliación de capital con la que sus accionistas aportarán 1.300 millones de euros.

El grupo también financiará la operación en Puerto Rico mediante nueva deuda bancaria y caja disponible.