El administrador concursal de Unipapel pide 293 despidos

El administrador concursal de Unipapel pide 293 despidos

23 febrero, 2017
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Actualizado: 23 febrero, 2017 1:47
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El administrador concursal de Unipapel, Santiago Manuel Oliveros, ha solicitado hoy al juzgado de lo mercantil número tres de Madrid la extinción colectiva de los contratos de trabajo de los 293 empleados de la compañía en Logroño, Aduna (Guipúzcoa) y Tres Cantos (Madrid).

Así lo ha señalo a Jaime Calvo, secretario general de Industria de USO La Rioja, sindicato mayoritario en la planta riojana de esta empresa, que ha añadido que el administrador ha adoptado esta decisión al no lograr hacer viable la empresa ni tampoco su venta.
Por ello, ha solicitado que comience el periodo de consultas entre los representantes de los trabajadores y la administración concursal para determinar la forma en la que se extinguirán todos los contratos de trabajo.
Ha explicado que, desde el pasado mes de julio, la plantilla de Unipapel percibe prestaciones por parte del Servicio Público de Empleo, con las que ha paliado su situación, después de acumular varios meses de impagos de sus nóminas.
El responsable de USO ha lamentado que el administrador concursal no haya logrado la viabilidad de la empresa, aunque ha dicho que, durante el pasado verano, «sí habíamos oído rumores de que la empresa se iba a vender».
Calvo cree que desde el verano «ha pasado demasiado tiempo» y «eso ha hecho que los problemas, en vez de ir a más, hayan aumentado».
Unipapel es una compañía fundada en la década de 1970 tras la fusión de tres fabricantes españoles de material de papelería, que después se integró en el Grupo Adveo en 2012, distribuidor internacional de producto de oficina y que cotiza en el mercado continuo.

Los despidos vienen después de que Unipapel, una empresa fundada en 1970, fuese adquirida en 2014 por el fondo de capital riesgo Springwater Capital

En abril de 2014, el fondo Springwater Capital adquirió a Adveo la división industrial y sus marcas por 16 millones de euros, según la información facilitada entonces, para continuar con su evolución industrial.
Menos de dos años después, las plantas de la antigua Unipapel empezaron a tener problemas de suministros de materia prima por una deuda con proveedores de unos 20 millones de euros, de acuerdo con datos de fuentes sindicales.
Los problemas en la empresa depararon que, en mayo del año pasado, Springwater planteara un cierre temporal de sus tres fábricas de España durante, al menos, seis meses, aunque admitía que se podría prolongar hasta dos años; además de 109 despidos.
Sin embargo, la Audiencia Nacional anuló posteriormente esa medida al considerarla «fraudulenta», por lo que se nombró un administrador concursal, que es quien ahora ha planteado las medidas encaminadas al cierre de la empresa, ha explicado Calvo.

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