El Gobierno de Meloni da luz verde a la entrada en la red de Telecom Italia tal y como acordó con el fondo KKR
El Gobierno italiano aprobó hoy una serie de decretos para hacerse con un máximo del 20 % de la proveedora de infraestructuras de red de Telecom Italia (TIM) por un valor de 2.200 millones de euros, en el marco del acuerdo firmado con el fondo de inversión estadounidense KKR.
El Consejo de Ministros de Giorgia Meloni aprobó dos decretos: uno para recaudar los recursos necesarios para la inversión, unos 2.200 millones de euros, y otro para permitir la entrada del Ministerio de Economía en el accionariados de la compañía,
La vuelta del Estado a Telecom Italia será, en cualquier caso, minoritaria, con un máximo del 20 % del capital, según detalló en una rueda de prensa el ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti.
«De este modo queremos asegurar el ejercicio de poderes especiales y garantizar la capacidad de incidir en términos de estrategia y seguridad en lo que nosotros consideramos una red decisiva también para el futuro del país», sostuvo.
El pasado 10 de agosto el Ministerio de Economía italiano firmó un memorando de entendimiento con el fondo de inversión KKR para la compra de la red fija del gigante de las telecomunicaciones Telecom, en la que el Estado tendrá hasta el 20 % de la entidad resultante de la operación, llamada NetCo.
Telecom Italia acordó con el fondo KKR la venta de su red fija
El pasado junio, Telecom (también conocido como TIM) aceptó la oferta del fondo de inversión estadounidense KKR para hacerse con su red fija -valorada según la prensa económica en unos 23.000 millones de euros- que pretende integrar en NetCo.
«Se dio mandato unánime para iniciar, con carácter exclusivo, una negociación mejorada con KKR, dirigida a obtener la presentación -en todo caso antes del 30 de septiembre- de una oferta definitiva y vinculante», informó la compañía.
La decisión supuso el rechazo de la oferta lanzada por el consorcio formado entre Cassa Depositi e Prestiti (CDP) -cuyo principal accionista es el Ministerio de Economía- y el fondo de inversión australiano Macquarie.