El consorcio SIS, formado por Fininc y Sacyr, comenzó el 1 de diciembre la operación de varias autopistas italianas: A21 Turín-Alessandria-Piacenza, A5 Turín-Ivrea-Quincinetto, el enlace A4/A5 Ivrea-Santhià, el Sistema de Autopistas de Circunvalación de Turín (Satt) y el tramo Turín-Pinerolo, que en conjunto suman 320 kilómetros de infraestructura.
Este contrato, otorgado por el Ministerio de Infraestructuras y Transportes de Italia, se estima generará ingresos por tráfico superiores a 2.900 millones de euros durante los 12 años de concesión. La adjudicación incluye tanto el diseño como la ejecución de mejoras en las autopistas, con una inversión de 800 millones de euros destinada a su modernización.
Estas vías son claves para la comunicación en el norte de Italia, facilitando la conexión de Turín con otras ciudades importantes en una de las regiones más industrializadas del país, según ha informado Sacyr. Además, las autopistas gestionadas por SIS cuentan con una intensidad media diaria de alrededor de 33.000 vehículos.
Italia es un mercado estratégico para Sacyr, que, a través de SIS, ya gestiona cuatro concesiones importantes: la autopista Pedemontana-Veneta, la A-3 Nápoles-Pompeya-Salerno, la Vía del Mare y la mencionada A21/A5. Además, en octubre, Sacyr logró la adjudicación del proyecto Parco della Salute, della Ricerca e dell’Innovazione di Torino (Parque de la Salud, Investigación e Innovación de Turín), que incluirá un nuevo hospital y un campus universitario.
Por otro lado, la empresa Sacyr desarrolla infraestructuras viarias en Florida y Texas. En este último Estado se encargan de la ampliación de la autopista interestatal conocida como IH35E.
